Alimentos que debes evitar si quieres una despensa sana

Son sabrosos y se preparan casi instantáneamente. Se compran en forma de snacks, postres o platos listos para comer y su ingesta se ha incrementado en las últimas décadas.

Entre ellos es encuentran los refrescos, pan blanco, bolleróa, carnes procesadas, salsas y precocinados.

El consumo excesivo de este tipo de alimentos puede no dar síntomas de daños en el periódo inmediato pero a largo plazo puede aumentar el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2, enfermedad cardiovascular y cáncer.

Aunque se encuentran en la categoría de alimentos ultraprocesados, merecen un apartado especial. Los refrescos aportan una gran cantidad de calorías vacías, es decir no aportan ningún valor nutricional.
Los refrescos light, que se comercializan como «sanos» incrementan el riesgo de padecer un ataque al corazón o muerte temprana sobre todo en mujeres de más de 50 años.

Los refrescos light incluso pueden hacer que tengas más hambre ya que suelen crear un incremento en la secreción de insulina y bajar el azúcar en la sangre y como reacción el cuerpo emite una señal de hambre cuando la bajada del azúcar no es compensada.
Las grasas trans se obtienen a partir de la hidrogenación parcial de los aceites vegetales, son usadas en la cocina industrial debido a su bajo costo y por que aumentan la durabilidad del sabor de los alimentos que las contienen pero son sumamente dañinas para el corazón y recientes estudios indican que podrían dañar también el cerebro.