Cuauhtémoc Blanco salió del Veracruz y regresó por tercera ocasión al América, esta vez para consagrarse como el máximo ídolo en la historia del equipo, que se proclamó campeón en el Clausura 2005.
Fue una serie bastante emocionante. América derrotó por un contundente marcador global de 7-4 a Tecos; empató 1-1 en el Estadio Tres de Marzo y ganó 6-3 en el Estadio Azteca. “Un gran recuerdo. La prensa y la gente decía: ‘uno de los mejores jugadores del país no ha conseguido un campeonato’. Gracias a Dios se dio en un buen momento. Fue una gran felicidad”, dijo en entrevista en exclusiva.
El Gobernador de Morelos nunca olvidará aquél 29 de mayo de 2005, día en el que por primera vez le dio la vuelta olímpica al Coloso de Santa Úrsula.
“Una gran alegría, una gran emoción. Recorrer todo el estadio, compartirlo con la afición y con la familia, que me estuvo apoyando en todo momento”, agregó. Las Águilas eran dirigidas por Mario Carrillo, quien tenía a su disposición a grandes jugadores como Claudio ‘Piojo’ López, Kléber Boas, Pavel Pardo, Germán Villa y el joven Guillermo Ochoa.
Cuauhtémoc Blanco recordó que tras haber conseguido la décima estrella del conjunto azulcrema los jugadores celebraron junto a Emilio Azcárraga Jean, propietario de Televisa y del América. “Fue una gran felicidad que compartí con la afición, con mis compañeros y con el dueño del equipo; recuerdo que le aventé el champagne en la cabeza.
