Los Phoenix Suns perdieron esta madrugada ante un rival directo, Portland Trail Blazers, en la lucha por estar en los playoffs y alargan un poco más su mal momento. Suman tres derrotas seguidas, cuatro en cinco partidos y siete en diez.
Las piernas flojean pero hay una buena noticia detrás de este bache: el duelo contra los de Oregón era el 25º y último de sanción para Deandre Ayton por “uso de sustancias no permitidas”.
El pívot podría redebutar este curso en Los Ángeles frente a los Clippers.
La derrota fue un duro castigo para unos Suns que dominaron gran parte del encuentro y que se encontraron a falta de 32 segundos dos arriba (112-110) tras una jugada de cuatro puntos de Kelly Oubre.
El alero fue el más destacado en los locales con 24 tantos. En la siguiente jugada, Lillard (27) sacó un dos más uno que fue definitivo.
Ricky Rubio pudo dar el triunfo a los suyos pero falló un triple cuando el duelo moría. McCollum fue el máximo anotador de la noche con 30 puntos.
El base, al margen de eso, completó otra brillante actuación en su mejor curso tanto en puntos (13,6) como en asistencias (9,6), un apartado estadístico en el que ya suma más de 4.000 en su carrera en la NBA.
El internacional español alcanzó el sexto triple-doble de su carrera, el primero desde el pasado 4 de marzo de 2017 (con Minnesota ante San Antonio Spurs) con 10 tantos, 11 rebotes y 14 pases de canasta.
