Francia vive la 3.ª jornada de huelga con choques y bloqueos

Francia vive su tercera jornada de huelga contra la reforma de las pensiones, a la que se han sumado los camioneros y los “chalecos amarillos”, entre otros.
Mientras que los servicios de trenes y metro se vieron gravemente afectados por una huelga contra la reforma de las pensiones, los camioneros han iniciado también sus movilizaciones bloqueando carreteras en aproximadamente 10 regiones de Francia en protesta contra el aumento de los impuestos sobre el diésel.
Los camioneros, que quieren que el Gobierno escuche su ira, han interrumpido el tránsito en carreteras de todo el país, desde la Provenza, en el sureste del país, hasta Normandía, en el noroeste. Por otra parte, miles de manifestantes del movimiento de los “chalecos amarillos”, que iniciaron hace un año sus protestas por un aumento similar de los precios de los combustibles, han vuelto este sábado a las calles de París, capital, con las mismas exigencias, es decir, justicia económica, pero han añadido a la lista de quejas los planes de reforma del sistema de jubilación propuestos por el Gobierno de Emmanuel Macron.
Hay tensiones y un gran desplazamiento policial en París. La Policía de París se ha enfrentado con gas lacrimógeno con manifestantes de este movimiento que celebra su 56.º sábado de movilizaciones contra el Gobierno.
París vive también otra manifestación, la de la Confederación General del Trabajo (CGT) que, junto a los estudiantes, protesta en el barrio de Montparnasse contra la precariedad y el desempleo. Otros grupos se han unido a la lucha: ahora hay refinerías en huelga y hay 12 depósitos petroleros bloqueados y escasea el combustible.