Doncic: «Nunca iría al Barcelona, el Real Madrid es mi familia»

En las entrañas del viejo Madison Square Garden, planta sexta, donde firmó el triple doble número trece de su carrera (33 puntos, 11 asistencias y 10 rebotes), pero otra vez sin premio ante los Knicks (dos derrotas para los Mavericks en dos partidos ante los neoyorquinos), Luka Doncic termina de vestirse en el vestuario visitante mientras Mark Cuban, dueño de la franquicia, pasa por allí con cara de pocos amigos.
Doncic, vaqueros y camiseta blanca, atiende sentado a un corrillo de medios de comunicación, entre ellos AS (único español), al que contesta amablemente en castellano todas sus preguntas. «Me alegro de que la afición en España me siga.
Me siento un poco español. Viví siete años allí. Muchas gracias a todos los que me siguen todos los partidos por la noche.
Lo agradezco mucho», empieza Doncic, que cuenta también que estuvo siguiendo un rato el Clásico de la Euroliga.
«Vi la segunda parte. Me desperté un poco antes de la siesta para verlo… Siempre quiero que gane el Madrid y creo que se lo merecieron».
El esloveno, que protagonizó una de las anécdotas de la noche cuando al principio del partido Spike Lee, en plan bromista, le negó un balón en la banda para sacar rápido antes de chocar su mano con el exmadridista, estuvo al tanto por supuesto del recibimiento a Nikola Mirotic en el WiZink Center.
Y por sus palabras, puede decirse que entendió la hostilidad con el nuevo jugador del Barça: «Creo que él lo sabe. Es normal que tenga eso, todo lo que se ha creado en Madrid.
No sólo ha jugado en Madrid, es que el Real Madrid lo crió». Preguntado si él cogería alguna vez ese puente aéreo para jugar en el Barça, fue contundente: «Nunca lo haría, nunca. El Madrid es mi familia».