Historiador ruso que descuartizó a exalumna la acusa de haberlo atacado

El célebre historiador ruso que reconoció haber matado y descuartizado a su pareja, acusó a su víctima de haberlo atacado, durante una audiencia judicial en San Petersburgo la que se le dictó prisión preventiva.
Pálido, mal afeitado, de jeans y suéter rojo, Oleg Sokolov, catedrático de historia en la Universidad Estatal de San Petersburgo y especialista de Napoléon Bonaparte, se cubrió la cara con las manos sollozando, antes de acusar a la víctima ante el juez.
«Nosotros realmente nos queríamos mucho, pero últimamente se volvía loca cuando se trataba de mis hijos» de un matrimonio anterior, dijo al juez.
«Esta chica me pareció un maravilloso ideal (pero) se convirtió en un monstruo», sostuvo Sokolov.
Ella «estaba muy agresiva», añadió entre lágrimas, y aseveró que durante la discusión durante la cual la mató, «todos perdimos el control». «No entiendo cómo sucedió. Nunca me había pasado. Ella me atacó con un cuchillo», dijo Sokolov.
«Me arrepiento profundamente de lo ocurrido y creo que la petición (de que quede detenido) es justa. Estoy profundamente sorprendido por lo que pasó», añadió.
La policía lo interceptó la mañana del sábado en las riberas del río Moika, en San Petersburgo. Estaba ebrio y llevaba una mochila en la que cargaba dos brazos de mujer y una pistola de alarma.
Detenido, el historiador, de 63 años, confesó haber matado y desmembrado a su compañera sentimental y exalumna, Anastasia Echtchenko, de 24 años.
Serguei Echtchenko, hermano de la víctima, afirmó que «los celos» eran la causa del crimen: «Ella le dijo que iba a la fiesta de cumpleaños de un amigo de la universidad. Él la golpeó, ella salió de todos modos y luego volvió a casa…», dijo en el sitio de noticias RBK.

Flagelo de violencia contra la mujer
Varias asociaciones consideraron este caso como un nuevo ejemplo del flagelo de la agresión contra la mujer en un país que despenalizó en 2017 la violencia doméstica y conyugal en la mayoría de los casos.

Alena Popova, activista por los derechos de las mujeres, denunció en Facebook un sistema judicial «podrido que protege a los hombres violentos hasta que se encuentra un cadáver». «Podríamos haber evitado este asesinato», agregó.

Sokolov ya había sido acusado de violencia, según el diario popular Moskovski Komsomolets y una petición publicada en el sitio Change.org, para que sean separados los líderes de la universidad por no tomar medidas disciplinarias.

La petición, que recogió unas seis mil firmas en pocos días y está dirigida al presidente Vladimir Putin -quien estudio en la misma universidad-, señala a la dirección académica de inercia ante el comportamiento «monstruoso» del profesor.

Moskovski Komsomolets publica que una estudiante que tuvo una relación con Sokolov en 2008 presentó una denuncia en la que afirmaba que fue golpeada con una silla por su amante, quien la amenazó con marcarla con hierro rojo porque quería abandonarlo.

«Hubo advertencias, pero nadie prestó atención (…) Es culpa de la dirección si no fue detenido a tiempo», afirmó Ivan Poustovois, estudiante de la universidad.