Culiacán no logra recuperar tranquilidad tras balaceras

  • Como una ciudad abandonada lució Culiacán este viernes luego de la balacera entre elementos de la GN y un comando armado de los hijos de Joaquín Guzmán Loera

CULIACÁN.

Como una ciudad abandonada lució Culiacán este viernes luego de la balacera entre elementos de la Guardia Nacional y un comando armado de los hijos de Joaquín Guzmán Loera.

Todavía durante la madrugada del viernes se estuvieron reportando algunos enfrentamientos y la quema de vehículos, por lo que la mayoría de las personas decidieron quedarse en sus hogares ante el temor de un nuevo enfrentamiento. Las escuelas suspendieron clases, los centros comerciales estuvieron solos e incluso algunos establecimientos bajaron sus cortinas por decisión propia.

En las calles todavía podían observarse secuelas del enfrentamiento, unidades quemadas en varios puntos de la ciudad impedían el libre tránsito para los que decidían o tenían la necesidad de trasladarse.

La mayoría de estas unidades se encontraba en el Desarrollo Urbano Tres Ríos, la zona donde se registró el enfrentamiento.

Las autoridades reconocieron 19 bloqueos en la ciudad con al menos 42 vehículos despojados, y nueve incendiados, a pesar de que en la calle había muchos más.

Fue hasta después de las 11:00 horas que elementos de la policía municipal y agentes de tránsito restringieron el acceso en las inmediaciones del Tres Ríos para comenzar a retirar las unidades con ayuda de grúas.

Entre las unidades habían tráileres, autobuses de pasajeros, vehículos particulares y algunas camionetas blindadas de los atacantes, los cuales quedaron en medio de la refriega.

A pesar de que las autoridades locales han dicho que ya pasó el peligro, algunas personas han decidido no arriesgarse, el trasporte público no se encuentra funcionando al 100 por ciento y los servicios de auto de alquiler en plataformas móviles tampoco están prestando el servicio.

Algunos negocios de comida suspendieron el servicio a domicilio y también recortaron sus horarios para darles facilidades de trasladarse a sus empleados.

Algunas instituciones educativas que tienen actividades académicas los fines de semana han decidido suspender las clases, con la reserva de poder reanudarlas el próximo lunes.

Se espera que estas mismas condiciones prevalezcan durante el fin de semana debido a que la zona del Tres Ríos es donde se encuentran la mayoría de restaurantes, bares y centros nocturnos de la ciudad, algunos de ellos afectados por las balas.