Recuerdan al iniciador del vidrio soplado en Jalisco

La Casa ITESO Clavigero inaugura este jueves la exposición “El aliento de la imaginación: vidrio soplado de Odilón Ávalos”. Gutierre Aceves, coordinador de Patrimonio Cultural y Coordinador del lugar, platicó que en total son 140 piezas, que dan un vistazo a la creación de Odilón, precursor de la técnica del vidrio soplado en Jalisco.

Fue en 1903 cuando Ávalos arribó a Guadalajara, procedente de su natal Puebla, donde aprendió el oficio por influencia familiar. En Jalisco permaneció hasta su muerte, en 1957. Al llegar se instaló cerca del templo de Analco, para después mudarse a la actual Avenida Revolución (la exposición incluye un dibujo de la fachada de su taller). Como maestro del oficio, agregó Aceves, Odilón tuvo varios discípulos que posteriormente tuvieron sus propios talleres.

Las salas de exposición de la Casa ITESO tendrán cerca de 90 piezas de vidrio soplado, además de unos retratos en barro, una lámpara, fotografías, las herramientas que utilizó para trabajar el vidrio soplado y reproducciones de un catálogo de las obras de Odilón Ávalos. La curaduría retomó el texto de José Rogelio Álvarez, quien en su momento entrevistó a las hijas del artista y estudió su obra.

Junto a las piezas hay fragmentos de su ensayo en el que expone el contexto y técnicas de Odilón.

Un ejemplo es la vitrina donde se muestran varias piezas con el vidrio soplado en diferentes colores, mismos que están explicados por el tipo de materiales que añadía al trabajar el vidrio.
Gutierre Aceves platicó que en un principio Odilón trabajó el vidrio, solamente, como medio de subsistir en la ciudad. La técnica del vidrio soplado la ejercía para sí mismo, incrementando su colección. Comenzó su labor fabricando botellas para los tequileros de la región. Cuando la industria tomó el trabajo artesanal de las botellas, Ávalos dio un giro a su taller y empezó a trabajar el vidrio soplado para vender. Las piezas que se exponen se pueden clasificar entre el diseño utilitario y el arte. Entre las constantes de creación están las figuras zoomorfas: toros, caballos, perros y gallos, además de flores. Los otros son objetos para el uso habitual del hogar: jarras para leche, agua, vino, licoreras y copas. Tanto las piezas artísticas como las de diseño tienen acabados detallados que dan cuenta de la calidad creadora y productora del maestro.

Complementan la exposición una serie de videos, algunos creados para la muestra. Entre ellos está uno donde Hipólito Gutiérrez recrea una pieza a partir del catálogo de Odilón, explicando el proceso. Un video más comparte el testimonio de los nietos de Ávalos recordando al abuelo; otro muestra al actor Ignacio López Tarso trabajando el vidrio soplado, en una película de ficción que se grabó en los talleres de la familia de Odilón Ávalos.

La mayoría de las piezas que se exponen provienen de su colección personal, ahora en resguardo de sus descendientes. Otras piezas provienen del Museo de Arte Popular de la Ciudad de México, el Museo Cabañas y el Museo Regional de la Cerámica de Tlaquepaque.