Para reducir a la mitad la pesada deuda heredada de más de mil 400 millones de pesos, el actual Gobierno de la capital continuará con la disminución de pasivos millonarios dejados principalmente por la anterior administración, entre los que destacan la falta de pagos de impuestos, razón por la cual el presente Ayuntamiento ha erogado más de 120 millones de pesos.
El Tesorero Municipal, Rodrigo Portilla Díaz mencionó que se espera en las próximas semanas destinar otros 80 millones de pesos, lo que permitirá saldar los adeudos relacionados con distintas contribuciones que se dejaron de pagar sin justificación alguna, de ahí que se trabaja a detalle para lograr su liquidación.
“Con esta última aportación se estaría cerrando ya todo 2017, y parte de 2018, por lo que se espera en agosto ya saldar los rezagos en impuestos. Al cierre de junio, se han pagado por eso concepto más de 120 millones de pesos”.
En cuanto a la reducción de la millonaria deuda arrastrada desde trienios anteriores, insistió en que la meta es bajarla a sólo 750 millones de pesos, y de lograrse sería la primera vez que la deuda de la ciudad se baje en un 50%, en el primer año de ejercicio de un Ayuntamiento.
Cabe recordar que esos poco más de 750 millones, 450 millones de pesos corresponden a la deuda a largo plazo, de la cual gracias a la renegociación que se llevó a cabo, se tienen mejores condiciones en cuanto a los intereses, lo que a su vez generará un ahorro no sólo en la actual gestión, sino en posteriores.
Y el resto de los 300 millones, son pasivos con contratistas y proveedores, Portilla Díaz pero igualmente se trabaja en la negociación y el pago de estos de manera individual, “puesto que también se dejó una lista de 40 mil cuentas por cobrar tan sólo en proveedores, que incluso vienen desde el año 2010”.