Un hombre falleció este martes en la ciudad belga de Amberes abatido por la policía tras atacar con un cuchillo a otra persona, a la que hirió de gravedad, según informó la agencia Belga, que precisó que el atacante sufría problemas psiquiátricos, por lo que probablemente realizó este acto, donde estuvo en peligro hasta su propia familia. Pacientes como este es difícil tratar por lo que deben de estar en tratamiento de por vida, y con mucha vigilancia para evitar estos incidentes.
El hombre hirió con un cuchillo al conserje de su edificio, quien fue trasladado a un hospital gravemente herido de gravedad, según confirman medios locales como la televisión pública flamenca VRT. La víctima recibió la agresión de manera sorpresiva que no pudo esquivarlo, por lo que fue herido.
Los medios señalan que una mujer contactó a la policía a propósito de su hijo, que sufría una enfermedad mental, y que cuando los agentes llegaron a su vivienda con el conserje, éste fue atacado con un cuchillo.
Fue entonces cuando la Policía abrió fuego y abatió al hombre, de 35 años.
La intervención policial, en la que no resultó herido ningún agente y que se produjo en un barrio en el este de Amberes, en el norte del país, motivó el cierre temporal de la zona al tráfico, si bien la policía aseguró en Twitter que «no había ningún peligro» para los vecinos, debido a que ya se había abatido al agresor.
La policía judicial belga ha abierto una investigación interna sobre el incidente de los hechos, precisó la cadena pública francófona RTBF.
