Tras ser notificada de su destitución como oficial del Registro Civil Número 11 de la capital potosina y luego de negarse a acatar el mandato que se le presentó de manera oficial, la mañana de este martes fue desalojada de las instalación de dicha oficialía la abogada María Teresa Carrizales, hecho para el que fue necesaria la fuerza pública dada la insistencia de la exfuncionaria para permanecer en un lugar no autorizado, razón por la que, además, fue remitida a la barandilla municipal.
El secretario general del Ayuntamiento, Sebastián Pérez García, informó que, en tiempo y forma y atendiendo todos los protocolos legales, se le informó a Carrizales sobre su destitución, sin embargo, ella se negó a aceptar la liquidación que se le estaba entregando además de hacer caso omiso a las indicaciones que se le proporcionaron por lo que continuó presentándose en la oficina para realizar diversas actividades como si permaneciera al frente de la institución.
Para el desalojo de la ahora ex funcionaria fue preciso el apoyo de varios agentes de la Dirección de Seguridad Pública Municipal quienes, en un primer momento, le notificaron sobre lo ocurrido para luego proceder utilizando la fuerza pública. En el acto, según informó el Ayuntamiento, participó la Coordinación Municipal de Derechos Humanos y la Comisión Estatal de Derechos Humanos quienes habrían garantizado el respeto íntegro a sus garantías individuales.
Del mismo modo, se informó que, luego de hacer una breve revisión en el lugar y en vísperas de que se lleve a cabo el proceso de entrega-recepción, se detectaron diversas inconsistencias que, esperan, puedan ser atendidas de manera eficaz pues algunas de ellas revelarían un mal uso de las funciones de la ex titular cuya situación jurídica está siendo aclarada.