La Fundación Elena Poniatowska cumplió ayer un año en medio de una crisis financiera que no le garantiza su existencia, por lo que podría cerrar. Además, si llega a su fin se abre la posibilidad de que se venda el archivo de la escritora ganadora del Premio Cervantes 2013. Así lo da a conocer en entrevista su director, Felipe Haro.
La Fundación se ubica en la colonia Escandón, en la Ciudad de México, inmueble en comodato; su operación arrancó con un presupuesto de 500 mil pesos otorgados por la Secretaría de Cultura local, monto que le permitió operar durante 2018. A partir de este año, dice, no ha recibido ningún apoyo institucional. Y pese a que es donataria autorizada, tampoco ha recibido donaciones que le permitan pensar en una sobrevivencia.
En casi un año, refiere, han realizado más de 100 eventos culturales, han catalogado más de cinco mil libros de 25 mil que conforman la biblioteca de la autora de “La noche de Tlatelolco”, han digitalizado más de 25 mil fotografías del archivo de Poniatowska, más de siete mil 500 personas han acudido a las conferencias, hasta marzo tenían un promedio de 750 visitantes diarios.
Dentro de sus objetivos también está preservar, organizar y difundir el archivo histórico de la escritora. Su existencia, afirma Haro, se justifica.