Joe Biden arrtastra una gran carga rumbo a las presidenciales de EU

Joe Biden se ha convertido en el puntero demócrata rumbo a la elección presidencial de Estados Unidos del 2020. La percepción de que es un hombre de clase trabajadora y su amistad con los líderes sindicales lo convierten en el candidato más probable para vencer a Donald Trump. Sin embargo, décadas de respaldo a los acuerdos de libre comercio que han vaciado de empleos a las fábricas en EU hablan en su contra.
Desde su apoyo al entonces Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) como senador de Delaware hasta su respaldo a la Asociación Transpacífica (TPP) como vicepresidente de Barack Obama, Biden desempeñó un papel clave en los últimos 30 años en la promoción de una agenda comercial que ahora es reevaluada por muchos.
Biden es el único de los 22 demócratas que se han postulado para presidente que votó el TLCAN. El pacto de 1993 incrementó el comercio y el crecimiento económico en Norteamérica, pero también condujo a un éxodo de empleos de manufactura de los EU a México y perjudicó los salarios de los trabajadores allá. En la campaña de 2016, la crítica de Trump al TLCAN fue fundamental para ganar estados que alguna vez fueron bastiones demócratas.
Al igual que con los asuntos de justicia penal, transporte y su comportamiento hacia las mujeres, el tema del comercio podría dejar a Biden vulnerable. Desde que declaró su candidatura el 25 de abril, sus críticos más vocales sobre el comercio han estado en la izquierda. El senador por Vermont, Bernie Sanders, quien votó contra el TLCAN como congresista, ha destacado la historia de Biden en materia de comercio.
Si bien la mayoría de los economistas afirman los beneficios de la liberalización comercial, estudios recientes han destacado las consecuencias en las industrias de EU afectadas por los efectos de la globalización. Uno de los principales factores de la pérdida de empleos en EU fue el surgimiento de China como una superpotencia manufacturera, tras ser admitida en la Organización Mundial de Comercio en 2001, una decisión que apoyaron Biden y otros demócratas.
Un artículo de 2013 de los economistas David Autor, David Dorn y Gordon Hanson descubrió que la exposición a la competencia comercial china fue la responsable de la pérdida de un millón de empleos en la industria manufacturera de EU entre 2000 y 2007, muchos de ellos en industrias regionales como el sector automotor.
Esos hallazgos hicieron eco en un documento de 2016, “El sorprendente declive del empleo manufacturero en EU”, de Justin Pierce, y Peter Schott.