Interapas y CEA, pozo y gozo. El monopolio de la Comisión Federal de electricidad

Como las historias de Yolanda Vargas Dulché, lo que sucede tanto en Interapas como en la Comisión Estatal del Agua, CEA, dan para largos dramas aunque sean historias extremas donde lo único común es la corrupción.
En el caso del Interapas nos gustaría partir de la premisa, al parecer ignorada en la CFE, de que “perro no come perro”… a menos que lleve meses sin comer y ya no vea la diferencia con tal de sobrevivir.
¿Será tanto el afán de cumplir los lineamientos del PresidentLópez Obrador, con su férreo control de la macroeconomía y sus recortes draconianos del gasto, que la Comisión Federal de Electricidad. CFE, prefiere exprimir a los órganos municipales de agua y ganarse una estrellita en la frente por neoliberal en vez del reconocimiento de la gente?
Por lo pronto, con el corte del servicio aflora la quiebra del Interapas aunque ya ayer la reconectaran. Que se obtengan algunas facilidades no resuelve el problema de fondo pues, ‘De dónde saldrá tanta deuda atrasada?
Todo indica que la CFE seguirá exprimiendo a los organismos operadores del agua, aunque sea inverosímil la postura de la paraestatal, sobre todo viniendo de un gobierno de izquierda encabezado por quien, en sus épocas de candidato llamó a conectarse con “diablitos” y no pagarle a la CFE en su natal Tabasco?
¿De dónde saldrá la solvencia moral de la CFE para bajar tarifas no sólo a los organismos de aguas sino a la ciudadanía en general, dado que el cambio climático obliga cuando menos a enchufar un rustico ventilador cuando no es posible la calefacción y el aire acondicionado pues se requerirán tanto en verano como en invierno, aunque cueste un ojo de la cara?

ABUSO DE PODER

Por si no lo ha registrado, a la primavera y al otoño, las estaciones templadas, se las llevó el calentamiento global; nos quedaron las temperaturas extremosas y así seguirán, o peor, si no rectificamos a tiempo.
Es hora de que la CFE se abra a la libre competencia y que los mexicanos dejemos de ser cautivos de paraestatales ineficientes y sin compromiso social ¿No cree usted que si otra empresa nos mejora tarifa y servicio, cambiaríamos de proveedor? Ahora solo hay de un queso y a eso se atienen los ratones de la Comisión.
En tanto en la casa de enfrente, la Comisión Estatal del Agua, un organismo que debió arropar los esfuerzos del Interapas, su dueño, perdón, su director, vive tiempos de jauja.
Jesús Alfonso Medina Salazar da y recibe contratos que aumentan su patrimonio a la sombra del cargo que le encomendó desde el inicio del sexenio, el gobernador Juan Manuel Carreras. No es moral que sea funcionario y constructor ¿Porqué no lo entienden?
Y mientras su jefe, el gobernador Carreras, se la rifa por otros lares, el director de la CEA suma ya más de 40 jugosos contratos tan solo en la SCT federal donde, desde los tiempos de César García Coronado como delegado, figura entre los “contratistas consentidos”, que en junio pasado denunciaba la CMIC antes de que su entonces titular se incorporara al habiente del Edil Xavier Nava Palacios.
La historia más reciente se escribió el pasado jueves 16 de mayo, cuando la SCT firmó el contrato mediante el cual adjudicó a la empresa del director de la CEA Jesús Alfonso Medina Salazar: Infraestructura del Golfo S.A. de C.V., el contrato por más de 99 millones de pesos para un tramo de 2.5 kilómetros, de la modernización de la carretera Valles – Tamazunchale, una obra largamente impulsada por el gobernador Juan Manuel Carreras López.

LICITACION TRUQUEADA

Desde el primer año de su gobierno, Carreras comenzó a tocar puertas para lograr este apoyo por parte del gobierno Federal: en el último semestre del sexenio anterior logró el del saliente Enrique Peña Nieto y en marzo pasado, en Aquismón, el del Presidente López Obrador.
La única mancha en todo esto, es que la empresa que “gana” esta obra es propiedad del director de la CEA y de su hermano, el ex candidato del PAN al ayuntamiento de Ciudad Valles, quien por poquito es lanzado por el PRI.
El contrato tiene por objeto la modernización y ampliación del cuerpo existente de 7.0 a 29.0 metros de ancho de corona, mediante la construcción de terracerías y señalamiento vertical y horizontal del kilómetro 369+536 al 372+050 con 2.51 kilómetros de longitud del tramo Portezuelo-Ciudad Valles hacia Tamazunchale.
La delegación de la SCT federal, ahora a cargo de Ernesto Cepeda Aldape, da por concluido el proceso de licitación pública nacional número LO-009000966-E56-2019 cuyo fallo se hizo público el pasado 10 de mayo cuando, pese a que en el proceso de licitación participaron 20 constructoras, al final Infraestructura del Golfo S.A. de C.V., empresa a la que en los últimos cinco años la SCT le ha adjudicado más de 40 contratos por unos 700 millones de pesos, “resultó” ganadora. Sin embargo solo tres de esas 20 participantes, presentaron propuestas para las que la SCT encontró que solo dos tenían solvencia, decidiéndose por la constructora del director de la CEA, “porque hizo la propuesta más baja”.

ASI, QUÉ FÁCIL

Su “competidora”, ¿o comparsa? Sánchez Valdez Construcciones S. A. de C. V. en asociación con Maquinaria y Renta de Zacatecas S.A. de C.V. presentó una propuesta técnica de 108 millones 950 mil pesos, contra los 99 millones 497 mil 200 pesos de la constructora de Medina Salazar.
Según el acta de la SCT, tres empresas fueron descartadas en automático porque ofrecieron montos muy altos, de entre 121 y 134 millones de pesos, mientras que el resto se descartaron por no alcanzar como mínimo 37.5 puntos “de 50 posibles”, en la evaluación de sus propuestas técnicas. ¿De Perogrullo, verdad?
Según la declaración de intereses de Jesús Alfonso Medina Salazar, en su 3 de 3, desde hace 18 años es accionista de Infraestructura del Golfo SA, con el 35% de las acciones. El caso es que desde la Comisión Estatal del Agua, con sus “negocios particulares” Medina Salazar empaña la hasta ahora impecable administración de Juan Manuelk Carreras por lo que, con la lealtad de Josefa González, también él debería elegir si quiere seguir haciendo negocios o seguir de funcionario público para no alentar suspicacias sobre tráfico de influencias, cochupos y enriquecimiento ilegal a la sombra de la administración carrerista.
¿Qué diría AMLO de enterarse de éste, al menos, conflicto de intereses? Si a su compadre y amigo, mejor le pidió salirse del negocio de la proveeduría de papel para los libros de texto, pese a que desde antes había ganado la licitación ‘No cree que JMCL igual, para evitar suspicacias, lo debería relevar del cargo? ¿Y qué, de las “herencias” de García Coronado a Cepeda Aldape? ¿En la 4T, todo va a segur igual?
Y no sin antes compartir la alegría y frescura del chubasquito de ayer, aquí nos leemos el próximo domingo.