Votan europeos para fijar el rumbo de la UE

Los europeos acudieron a las urnas el domingo en mayor número que en otras oportunidades, para unas elecciones en las que los encuestadores predicen que los partidos tradicionales pro-europeos saldrán debilitados y mientras que los nacionalistas se verán fortalecidos en el Parlamento Europeo.
La participación aumentó respecto al nivel de 2014 en algunos países clave, entre ellos Alemania y Francia. A las 1000 GMT, alrededor del 29% de los alemanes habían votado, frente al 26% de hace cinco años, mientras que el 19% de los franceses habían votado, frente al 16%. Los centros de votación cierran a las 1800 GMT en esos países.
En España, la participación aumentó alrededor de 10 puntos porcentuales desde 2014, y en Polonia, aunque sólo era del 14% a las 1000 GMT, ya se había duplicado la tasa de participación de hace cinco años a la misma hora.
En Hungría, donde el primer ministro euroescéptico Viktor Orban lanzó un grito de guerra en su campaña para “detener la migración” mientras emitía su voto, la participación aumentó en más de la mitad, con un 31% a las 1300 GMT, según cifras oficiales.
Siete estados ya han votado y 21 se unieron el domingo en lo que es el mayor ejercicio democrático del mundo después de la India.
Los resultados provisionales se esperan después de la votación final, en Italia, a las 2100 GMT, pero el Parlamento Europeo hará una primera proyección de sus 751 escaños poco después de las 1800 GMT.
Los populistas de derecha encabezan las encuestas en dos de los cuatro grandes Estados miembro —Italia y el supuestamente saliente Reino Unido— y también podrían ganar en Francia.
Sin embargo, las encuestas a pie de urna en algunos países que ya han votado han dado cierta tranquilidad a los partidos pro-europeos. El Partido Laborista holandés, casi extinguido, parece haber terminado primero, ayudado por la visibilidad de contar con el candidato principal de los socialistas de la UE, el actual subdirector general del bloque Frans Timmermans.

Una encuesta tras la votación del viernes en la Irlanda profundamente a favor de la UE apuntaba a una esperada “ola verde”.
En todo el bloque, la preocupación por el cambio climático y el medio ambiente puede reforzar al grupo de los Verdes favorable a la UE y podría significar regulaciones más estrictas para la industria y para las condiciones que se puedan establecer para los socios que buscan acuerdos comerciales.
El Reino Unido también votó el jueves y se pronostica que un nuevo partido enfocado en salir de la UE terminaría primero, pero no ha habido datos de encuestas a pie de urna. La atención se ha centrado en la dimisión de la primera ministra Theresa May. Los resultados saldrán durante la tarde del domingo.