Gael García y su romance con Cannes

La carrera de Gael García Bernal siempre ha ido de la mano del Festival de Cannes, donde se presentó como actor con “Amores perros”. Ahora regresa como único director mexicano seleccionado en el certamen, con su segunda película “Chicuarotes”.

Su primer papel en 2000 también supuso el estreno en Cannes del director Alejandro González Iñárritu, convertido en gigante del cine y presidente este año del jurado del Festival.

Iñárritu asistió el lunes a la proyección fuera de competición de “Chicuarotes”, junto al actor Diego Luna, socio de García Bernal en su nueva productora “La corriente del Golfo”.

En “Chicuarotes”, García Bernal, de 40 años, bucea en las raíces de la violencia juvenil de México. “Cagalera” y “Moloteco”, dos adolescentes de San Gregorio Atlapulco, al Sur de la capital, viven desesperados por salir de la pobreza y agarrarse a una esperanza de futuro, lo que para ellos sólo puede pasar por dar un golpe y huir del pueblo.

“Chicuarotes” es un gentilicio. La forma en que se llama a las personas de San Gregorio de Atlapulco. Viene de un chile endémico de la zona que es muy resiliente, muy duro y muy picante. Les dicen así (a los habitantes) porque refleja su carácter.

“Chicuarotes” se abre con una fatalidad: los protagonistas vestidos de payasos tratan de ganarse un dinero a bordo de un autobús. Como no recaudan nada, desenfundan un arma.

La primera escena resume la película. ‘El Cagalera’ es este personaje con una falta de perspectiva en la vida. Como no puede conseguir las cosas por las buenas, lo hace por las malas. Es una lógica que se genera a través de crecer en un entorno conflictivo. Esos niños van a crecer y cometer cosas terribles. Hay mucha gente que se salva de eso, pero la gran problemática es la espiral de violencia. Por más que el gobierno, que la sociedad haga acciones para detener esa violencia, si en la familia no hay un núcleo amoroso es poco probable que todo lo demás salga adelante.

¿“Cagalera” es un
antihéroe?

Es interesante ver estos personajes que te traicionan. Estás con ellos en el cuento pero por una acción impulsiva, donde su diablito puede más, están destinados a cometer algo terrible. Me parecen fascinantes porque cambian el género de la película. Me gustan las películas que son poco definidas en torno a un género y de hecho para que haya un buen drama tiene que haber mucho humor.

Ante la violencia, las mujeres son las únicas que mantienen la sangre fría.