Sarampión y rubeola… algunos datos

(World Health Organization Apr 15, 2019; Nat Briefing)

El reconocimiento oportuno de sarampión y rubeola es crítico para su control a través de detección temprana y análisis de transmisión en base a patrones y reporte de los casos.
Mayoría de los estados de los EEUUA envían reportes mensuales de los casos identificados como sospecha y confirmación de sarampión y rubeola al registro Nacional de Enfermedades Infecciosas y a la Organización Mundial de la Salud; en general, el número de casos reportados representa sólo una proporción pequeña en relación al número de casos reales de la población, ya que algunos pasan desapercibidos y otros aún bajo diagnóstico preciso, no se reportan. Adicionalmente, hay retraso de 1 a 2 meses para reportarlos. Independientemente de lo antes escrito, en el presente año, los casos de sarampión son 3 veces más que lo informado en la misma fecha para los años anteriores, ante lo que hay alarma en el país vecino del norte.

¡Difteria cutánea!
(Griffith J et al. MMWR Morb Mortal Wkly Rep 2019 Mar 29)

Se reportaron 4 casos de difteria cutánea en viajeros que regresaron de áreas endémicas de Corynebacterium diphteriae. La difteria respiratoria y cutánea ya no son endémicas en los EEUUA, debido a la vacunación e inmunización con la vacuna que contiene el toxoide diftérico, a menudo reforzado por la administración profiláctica de la antitetánica por la vacuna triple contra tétanos-difteria-tosferina.
Estos 4 casos de difteria cutánea se reportaron a los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de septiembre de 2015 a marzo de 2018 de pacientes de Minnesota, Washington y Nuevo México, posterior a retorno de viaje de Somalia, Etiopía y Filipinas. Inicialmente no se sospechó difteria hasta no identificar los organismos corineiformes de las lesiones exudativas (de úlceras y vesículas) y su identificación por laser a través de espectrometría de masas; en tres de los 4, hubo otros microrganismos (estafilococo, estreptococo y pseudomonas); todos los infectados curaron con penicilina o eritromicina. Uno de estos pacientes había recibido vacunación con toxoide diftérico 8 años antes.

Los datos disponibles desde 1998 a 2017 en los CDC, conforman 248 aislados humanos de C. difteria, de los que 130 (52%) fueron cutáneos. El tratamiento debe de llevarse con 14 días con los antibióticos mencionados y los contactos cercanos deben de recibir tratamiento con penicilina o eritromicina también.
La vacunación protege menos al paso de los años y no es útil el empleo de toxoide en casos agudos.

Transplante de órganos de personas infectadas por virus C de hepatitis(Woolley AE et al. N Engl J Med 2019; DOI: 10.1056/NEJMoa1812406)
Mil pacientes mueren cada año en espera de trasplante de corazón o pulmón. Aunque el trasplante de órganos ha aumentado 20% en los últimos años, en gran parte debido a mayor número de potenciales donadores que mueren por sobredosis de drogas, los que antes se limitaban por la seropositividad de virus C de hepatitis.
En el pasado, el trasplante de órganos de donadores infectados por el virus C de hepatitis hacia recipientes no infectados, condenaba a éstos a transmisión del virus en 82%, lo que adicionalmente les confería mayor riesgo de rechazo por problemas de daño vascular y rechazo acelerado.

Actualmente y derivado de la experiencia con trasplantes de riñón e hígado, la infección por virus C de hepatitis se trata de manera efectiva y se alcanza curación con la terapia potente antiviral, la que se lleva a efecto horas posterior al trasplante independientemente del genotipo.

Los autores estudiaron 44 pacientes que recibieron trasplante de corazón o pulmones con virus de hepatitis C, a quienes se les trató con sofosbuvir-velpatasvir por 4 semanas, desde horas después del trasplante para bloquear la replicación viral; 26 recibieron pulmones y 8 corazón, con promedio de carga viral de 890,000 UI/ml (276,000 a 4.63 millones), con genotipo 1 en 61%, genotipo 2 y 3 en 17% cada uno e indeterminado en 5%; el 95% tuvo carga viral indetectable inmediatamente posterior al trasplante(1800 UI, de 800 a 6180) y el 100% a 6 meses estaba vivo y sin carga viral.a proteína total tau es mayor en personas con la enfermedad Alzheimer (AD) y otras demencias que se asocian a deterioro cognitivo (MCI). Lo anterior se evidenció en dos estudios longitudinales con la finalidad de determinar estas enfermedades demencialesen quienes la proteína total tau mostró endofenotipos.