Perspectiva externa

  • Cuantioso déficit comercial en administración de Peña-Nieto por -247 mil 318.08 millones de dólares, debido a falta de aplicación del modelo económico Harrod
  • Prospectiva de ingresos tributarios de Comercio Exterior por 1 billón 043 mil 911.94 millones de pesos que representan el 17.88 por ciento del Presupuesto de Ingresos de la Federación al 31 de diciembre del 2019

Los resultados obtenidos durante la administración pública federal
de Enrique Peña Nieto (2012-2018) fueron desastrosos, producto del bajo crecimiento económico, excesiva corrupción, injustas desigualdades, sobreendeudamiento, depreciación acelerada, creciente déficit de comercio exterior e inseguridad generalizada por la falta de adecuadas políticas y aplicación de modelos de corrección de los profundos desequilibrios en la balanza de pagos.

La economía mexicana salió seriamente afectada, dada su gran dependencia de la economía de Estados Unidos, mientras que las anteriores autoridades federales actuaron en forma inadecuada, incorrecta, ineficiente e ineficaz, debido a los resultados del cuantioso déficit comercial no petrolero en la administración de Peña-Nieto, cuyas cifras fueron ocultadas a todos los mexicanos, mismas que ascendieron a un nuevo récord histórico de -247 mil 318.08 millones de dólares, debido a la falta de aplicación del modelo económico denominado Harrod.

Roy Forbes Harrod (Norfolk, 13 de febrero de 1900 – 8 de marzo de 1978) fue un economista inglés que estudió historia y filosofía en la Universidad de Oxford, donde ejerció su labor profesional de Economía en la Universidad de Cambridge, donde conoció a John Maynard Keynes, a quien tuvo un profundo respeto intelectual. Pese a no ser uno de los miembros del Cambridge Circus, fue uno de los primeros en tener acceso a la Teoría General en su versión preliminar, aportando la única gráfica que hay en la Teoría General. Su afinidad y respeto por la obra de Keynes le llevó a escribir en 1951 “Life of John Maynard Keynes”. Participó en la vida política inglesa como asesor de Winston Churchill durante la II Guerra Mundial y luego del primer ministro Harold Macmillan, entre 1957 y1963.

El reconocimiento de Harrod como uno de los grandes economistas del siglo XX se debe a sus aportes a las teorías del crecimiento económico, el análisis dinámico y la teoría del comercio internacional, en los que se ha reconocido el carácter pionero de su trabajo. En particular sus escritos «An Essay in Dynamic Theory» (1939) y «Second Essay in Dynamic Theory» (1960) aparecidos en el Economic Journal y su libro “Economic Dynamics” (1973) marcaron por un buen tiempo el desarrollo de la disciplina en este terreno.

El famoso modelo de Harrod-Domar amplía las ideas de Keynes, a través de la macroeconomía dinámica, es decir, el análisis de las fuerzas determinantes de las tasas de aumento de las principales categorías de la demanda de bienes de capital, exportaciones, entre otros. En este sentido, el modelo plantea la importancia de las expectativas como factor que podría influir sobre dichas variables.
Este modelo pretende dar un enfoque dinámico al aporte de Keynes y establece un modelo que iba a ser punto de base para desarrollos posteriores, que intentaron mejorarlo a través de la introducción de nuevas hipótesis o variables. El modelo de Harrod-Domar se realizó de forma paralela e independiente, pero ambos planteamientos llegaron a conclusiones similares.

El modelo de Harrod se aproxima al problema del crecimiento económico con un tratamiento asumir que el progreso técnico puede considerarse como una propensión interna del sistema económico. La tasa de acumulación es una función de las decisiones empresariales encaminadas a realizar ganancias, sin ninguna garantía de que el nivel de inversión se ajustaría al requerido en una economía de libre mercado.

La tasa garantizada de crecimiento del modelo de Harrod está basada en la doctrina de la demanda efectiva de Keynes, y visualiza la tasa de expansión económica como determinada por la interacción del multiplicador y del acelerador. Hay que señalar que en el marco analítico de Harrod, la trayectoria de crecimiento de la economía no necesariamente conduce al pleno empleo.

Se suele considerar que el principal mérito de Harrod es haber incorporado una perspectiva de largo plazo al análisis de Keynes. Igualmente, en esa interpretación es usual no hacer referencia a que Harrod se preocupó por dilucidar las razones de las fluctuaciones cíclicas de la economía y de sus relaciones con la pauta de expansión de la actividad productiva, lo que no es lo mismo que por el crecimiento de largo plazo. Asimismo, el consenso es que las hipótesis asumidas por Harrod en su modelo de crecimiento fuerzan un comportamiento agudamente inestable de la actividad económica, con un equilibrio de «filo de navaja», en el cual cualquier desviación de la economía de su senda de crecimiento de equilibrio tiende a magnificarse de manera explosiva. Harrod negó reiteradamente que su análisis tuviese como exclusivo marco de referencia el largo plazo. Por el contrario, explícitamente señaló que su foco de atención analítico era la evolución dinámica de la economía en cada momento del tiempo. Es decir, el propósito de su análisis fue examinar desde una perspectiva dinámica los determinantes de las fluctuaciones y la tendencia de la actividad productiva.

Como en todo modelo económico con inestabilidades fundamentales, el de Harrod se enfrentó a un fuerte rechazo. En efecto, tal como está formulado no hay algún mecanismo evidente que asegure la convergencia de la tasa garantizada, la tasa natural y la tasa real de expansión de la actividad productiva. Este rechazo, en última instancia, motivó que otros economistas buscaran introducir mecanismos endógenos capaces de corregir dicha inestabilidad intrínseca del modelo. Dos soluciones cobraron particular relevancia. La primera fue propuesta por Solow quien, en línea con el enfoque neoclásico, consideró poco realista suponer constante el coeficiente capital-producto. Solow propuso revisar el modelo de Harrod con base en la idea de una función de producción que en esencia introduce un mecanismo de ajuste en el cociente capital-producto, de manera que se corrija la inestabilidad en la senda de largo plazo de expansión de la economía. En contrapartida, la solución asociada con el trabajo de Kaldor gira en torno a la introducción de un mecanismo de ajuste mediante cambios en la proporción del ahorro ocasionados por una redistribución del ingreso entre ganancias y salarios.

En cuanto a su aportación al comercio internacional, su principal aportación publicada en 1933 como “International Economics”, presentó un enfoque original del tema, en particular al introducir una nueva visión sobre la interrelación del balance comercial y el nivel de ingreso nacional. Basado en el trabajo de Kahn, Harrod introdujo el concepto del multiplicador del comercio exterior y concluyó que el incremento de las exportaciones conduce a un aumento del ingreso nacional en términos reales tal que permite que las importaciones inducidas aumenten lo suficiente para restablecer el balance comercial inicial. Es precisamente esta noción del multiplicador del comercio exterior el que sirvió de base al desarrollo de la perspectiva keynesiana del crecimiento económico de largo plazo. Dicha perspectiva interpreta a la demanda externa y más precisamente a la disponibilidad de divisas, como el obstáculo fundamental al crecimiento económico de largo plazo.

Esta visión ha demostrado su utilidad para entender el desempeño macroeconómico de las naciones semiindustrializadas, donde de manera recurrente las fases de fuerte repunte de la actividad productiva desembocan más temprano que tarde en crisis de divisas limitando la tasa de expansión económica de largo plazo.

La extensión del modelo del multiplicador de Harrod tiene su expositor principal en Kaldor, y posteriormente en Anthony P. Thirlwall y sus colegas Nuraldin Hussein y John McCombie, quienes han desarrollado lo que se ha denominado modelo de restricción de balanza de pagos el crecimiento económico (RBPC).

Los expertos, investigadores, especialistas y estudiosos del comercio exterior, se sorprendieron con los resultados de 1 mil 222 millones de dólares de superávit en la balanza comercial en México, producto del saldo de 2 mil 215 millones de dólares de superávit de la balanza de productos no petroleros en el mes de febrero del 2019.

La dependencia de las exportaciones mexicanas a los Estados Unidos de América, disminuyó de 88.65 por ciento en 2004 a 81.14 por ciento en 2019, mientras que crecieron y se diversificaron del 11.35 por ciento en 2004 a 18.86 por ciento en 2019 a diversos países del resto del mundo.

Entre los resultados positivos del primer bimestre del año en la actual administración pública federal, destaca un incremento de 29 mil 862.48 millones de pesos con una tasa anualizada de crecimiento del 21.5 por ciento en los ingresos tributarios derivados de las operaciones del comercio exterior al pasar de 138 mil 879.45 millones de pesos en la administración de Enrique Peña Nieto a un monto de 168 mil 741.93 millones de pesos en el primer bimestre del 2019.

Es importante destacar que la reactivación al comercio exterior se demuestra y comprueba plenamente con la recaudación del Impuesto de Importaciones por un valor de 12 mil 050.53 millones de pesos que representan el 7.14 por ciento del total del impuesto tributario recaudado y genera un efecto multiplicador del 92.86 por ciento que equivale a un monto de 156 mil 691.40 millones de pesos, concentrando el Impuesto al Valor Agregado (IVA) un monto de 112 mil 171.00 millones de pesos con una participación del 66.47 por ciento, seguido del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) por 43 mil 685.73 millones de pesos con una contribución del 25.89 por ciento y 0.50 por ciento restante de otros impuestos y derechos federales por 834.68 millones de pesos, siendo mi prospectiva de ingresos tributarios por un monto total de 1 billón 043 mil 911.94 millones de pesos que representan el 17.88 por ciento del Presupuesto de Ingresos de la Federación al 31 de diciembre del 2019.

 

agkaram@hotmail.com