Mujeres son más vulnerables en contraer hepatitis C

Mujeres son más vulnerables en contraer hepatitis C, por objetos contaminados.

Los objetos contaminados pueden registarse al realizarse tatuajes, ‘piercings’ o tener contacto con algún instrumento contaminado durante la manicura o pedicura, un especialista alertó sobre dichos riesgos este viernes.

La hepatóloga Eira Cerda Reyes detalló en entrevista con Efe que, además, aquellas mujeres que hayan tenido alguna operación, parto complicado o aborto en México antes de 1994, también están en riesgo ya que el virus se transmite por la sangre.

«Antes de esa fecha los bancos de sangre en el país no hacían las suficientes pruebas a los donadores», señaló la también gastroenteróloga adscrita a la sección de gastroenterología del Hospital Central Militar.

La experta refirió que otros factores de riesgo son el consumo de drogas inyectadas e intranasales, así como punciones accidentales con agujas contaminadas o si se tuvo algún tratamiento de hemodiálisis o transfusión sanguínea con plaquetas antes de 1994.

Recordó que una de las principales complicaciones de esta enfermedad es la cirrosis, la cual es el resultado del daño crónico en el hígado.

Sin embargo, explicó que muchas veces las personas con esta condición pueden ser estigmatizados pues erróneamente la cirrosis es relacionada solamente con el alcoholismo «pero su origen puede estar en el virus de la hepatitis B o C».

Esta complicación se ha convertido ya en la séptima causa de muerte en las mujeres a nivel nacional, por lo que es importante, dijo, tomar conciencia al respecto.

De acuerdo con cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que 71 millones tienen infección crónica de hepatitis C y cada año mueren unas 400.000 personas por esta afección.

En Latinoamérica, aproximadamente 10 millones de personas están infectadas, mientras en México entre 400.000 y 600.000 personas viven con este virus.

Sin embargo, 95 % de ellas no están enteradas de su condición.

La especialista señaló que se estima que cada año se presentan 19.000 casos nuevos de la enfermedad, sin embargo, el grave problema es que los médicos del primer nivel de atención no están suficientemente capacitados para diagnosticar este padecimiento.

Cerda Reyes explicó que esta es una enfermedad conocida como silenciosa porque no presenta síntomas hasta que aparecen complicaciones.

Por ello, las personas pueden vivir muchos años con el virus sin saberlo.

La experta admitió que actualmente hay tratamientos altamente efectivos que incluso pueden curar la enfermedad hasta en un 95 % en pacientes no cirróticos.

Y en quienes ya desarrollaron cirrosis, puede detener incluso que lleguen a complicaciones.

Con la finalidad de hacer conciencia sobre esta enfermedad en los profesionales de la salud, el próximo 23 marzo se llevará a cabo el Primer Curso de Enfermedades Hepáticas en la mujer.