Carlos Covarrubias Rendón, asesor jurídico de los comuneros de San juan de Guada-lupe, de Suspiro Picacho y su anexo Cruces y Carmona, afirmó que no tiene temor de que vuelva a recibir una agresión como la que sufrió en semanas pasadas por lo que continuará la lucha legal en defensa de los recursos naturales y las tierras de los ejidatarios.
“Estamos listos para seguirle, tenemos que cuidar la salud pero no nos vamos a rajar ni echar para atrás, para eso estamos aquí, vamos a defender la causa con los compas, además la misma gente nos ayuda, nos protege y ellos están totalmente esperanzados que esto siga adelante, estamos puestísimo”, afirmó.
Esto luego de que el pasado 23 de febrero fue agredido por hombres con machetes momentos después de haber iniciado un recorrido por la Sierra de San Miguelito, por lo cual tuvo que ser trasladado al hospital donde estuvo internado en terapia intensiva.
Covarrubias Rendón informó que hay una demanda penal contra los responsables, y también descubrió que hay 44 amparos de los “juanes perreros”, y hasta los mismos, que están amparados contra carpetas de investigación, “y no sé porque algo han de haber hecho, a alguien debe de haber emboscado”.
Indicó que en cuestión de salud trae una clavícula lastimada y a la espera que se soldé bien un placa que le pusieron, un pulmón que se ha estado recomponiendo, y las costillas que van a tardar un rato en sanar, “físicamente estamos a un 70 u 80 y la misma prescripción médica dice sigue trabajando, lo anímico también cura”.
Añadió que está listo para continuar su lucha.
Aseguró que no le teme a las amenazas que pueda seguir recibiendo, puesto que las ha recibido de toda la vida, “lo que sucedió ese día es como una etapa decadente de Carlos López y su tribu, su desesperación al no poder con la lucha que se está dando en San Juan de Guadalupe, los tenemos súper derrotados, tenemos una resolución que los hunde para siempre”.
