Durante la lucha en contra del despojo de tierras ejidales hemos encontrado acciones concertadas entre los poderes políticos y económicos a fin de conseguir apropiarse de los mejores territorios, afirmó el asesor jurídico del Frente Amplio Opositor (FAO), Carlos Covarrubias Rendón.
El asesor del FAO señaló que en los últimos años se ha estructurado un modelo de apropiación de territorios que tienen como característica una forma de tenencia de la tierra colectiva, la cual a su vez establece formas de propiedad organizadas a través de usos y costumbres, muchas veces respaldadas por documentos con registros en instancias municipales.
Informó que la forma en que se opera esta modalidad de despojo consiste en obtener constancias municipales de áreas, con o sin empadronamiento, para después localizar a personas que se asuman como dueños o herederos con quienes pactan la simulación de contratos de compra-venta para lo cual cuentan con el aval de jueces auxiliares, y así posteriormente promueven ante un juzgado una orden de inscripción ante el instituto catastral y registral en el estado.
Carlos Covarrubias citó el caso de Guadalupe Victoria y su Anexo la Cruz, en el municipio de Mexquitic, en donde a fin de encontrar un sustento legal para su lucha se logró descubrir el gran fraude del programa de modernización del Instituto Catastral y Registral, y en donde gracias a la organización de la gente también se ha logrado expulsar del territorio al Grupo Caletto, de los Torres Corzo, a través del empadronamiento de cientos de lotes para los hijos y descendientes de comuneros y ejidatarios, así como la anulación del decreto de nacionalización promovido por el Padre Eduardo Córdoba, donde pretendían despojarlos de 380 hectáreas.