- Especialmente el sector de las artesanías espera incrementar su actividad al depender económicamente de la visita a la capital, siendo la Procesión del Silencio su mejor aliado
Comerciantes de la capital potosina esperan un repunte en ventas y en el número de turistas que visiten el estado durante la temporada de Semana Santa cubriendo los días 14 y 21 de abril, aunque en algunos casos como los estudiantes y ciertos sectores gozarán hasta dos semanas en total, tal y como lo señala el calendario de la SEP.
Para la Vicepresidenta de turismo de la Cámara Nacional de Comercio y Servicios Turísticos en el estado, Laura Lara Nájera, este 2019 se espera el repunte de visitantes durante la Semana Mayor, tal y como sucede cada año, contando también a las zonas Media, Altiplano y sobre todo la Huasteca como parte de esta tendencia que cada año alberga importantes cantidades de turistas.
No obstante, pese a los recientes hechos violentos transcurridos en estado vecinos, Lara Nájera asegura que esto no afectará la llegada de visitantes al estado, por lo que hace una invitación a los ciudadanos potosinos a coadyuvar en el cuidado de los turistas mediante la calidez y trato amable, siendo responsabilidad de la autoridad garantizar la seguridad tanto de visitantes como habitantes.
Por su parte, uno de los sectores que más participación tiene respecto a la llegada de turistas es el de las artesanías, al ser un accesorio atractivo para los visitantes al adquirir algún suvenir como recuerdo.
Así lo considera el C. Edgardo Ramírez, emprendedor y artesano local, quien señala el sector de las artesanías espera un incremento del 30% en la venta de dichos productos.
En efecto, dijo que los productos más pedidos por los visitantes son las tazas, playeras, llaveros las cajas de agua hechos con material de cantera, símbolo propio de la ciudad, siendo un gran pretexto para llevar como recuerdo o para sus familiares como regalo.
Afirma que dentro de lo que ofrece la capital del estado, los turistas disfrutan principalmente de la Procesión del Silencio, por lo que declara que los productores y comerciantes de artesanías están a la expectativa del turista, cuya fuente de ingresos depende principalmente de su visita a la ciudad.