Alcaldía de Colombia desaparece edificio Mónaco, guarida del ex narcotraficante Pablo Escobar

El derrumbe controlado, en el que participó más de un centenar de personas y que se ejecutó con 270 kilogramos de explosivos, fue presenciado por unos mil 600 invitados, como el momento cumbre de la presentación de “Medellín abraza su historia”, iniciativa que pretende contar el “doloroso” relato de esta ciudad.

Escobar eligió al barrio Santa María de los Ángeles, que hace parte de El Poblado, como el lugar para construir en 1986 el Mónaco, bautizado así en honor del principado, y residencia de varios de sus familiares y de sus guardaespaldas.

El edificio Mónaco, la lujosa guarida del narcotraficante Pablo Escobar, que por décadas simbolizó su poder, desapareció este viernes ante la mirada de muchas de las víctimas del narcoterrorismo en Colombia tras ser implosionado por las autoridades para cerrar un capítulo doloroso de Medellín.

A las 11:54 (hora local ) y en solo tres segundos, la edificación quedó reducida a una montaña de escombros en el exclusivo sector de El Poblado, donde será construido el “Parque Inflexión”, un memorial que rendirá tributo a las víctimas del jefe del cartel de Medellín.

El derrumbe controlado, en el que participó más de un centenar de personas y que se ejecutó con 270 kilogramos de explosivos, fue presenciado por unos mil 600 invitados, como el momento cumbre de la presentación de “Medellín abraza su historia”, iniciativa que pretende contar el “doloroso” relato de esta ciudad colombiana desde “el lado correcto”.

En el acto, realizado en el Club Campestre de Medellín y al que también asistieron estudiantes de colegios para “sembrar una semilla” en las nuevas generaciones, propuso un viaje por los capítulos más crudos del país, en el que se reivindicaron los valores y rindieron homenajes a víctimas como Luis Carlos Galán, aspirante a la presidencia asesinado en 1989 por una alianza liderada por el Cartel de Medellín.

Galán apuntó que este espacio permite “reconstruir la historia, pero no solo de las víctimas sino de ese proceso tan doloroso y difícil que vivió Colombia cuando los narcotraficantes lograron arrodillar al Estado y someter a mucha gente a su imperio criminal”.

Para Rochi Montes Barrientos, una exagente de la policía que carga con las secuelas de uno de los tantos atentados que ordenó Escobar, “hoy se transformó la vida” de todas la víctimas del extinto capo.

“Las víctimas están visibles, ya no son los victimarios los que van a aparecen en el escenario de los narcotours, en los que vinieron (turistas) a endiosar a Escobar”, expresó a Efe Montes.

Para ella, ver caer un edificio en el que “se planearon secuestros, asesinatos y destrucción” le permitirá empezar a “canalizar duelos” y a “desatar un nudo” formado desde el 3 de abril de 1990, día en el que la explosión de una granada le mutiló uno de sus brazos, cuando Escobar le puso precio a los policías.

El edificio Mónaco tenía doce apartamentos, 34 plazas de estacionamiento, tres ascensores, canchas de tenis, piscinas y baño turco.

Escobar eligió al barrio Santa María de los Ángeles, que hace parte de El Poblado, como el lugar para construir en 1986 el Mónaco, bautizado así en honor del principado, y residencia de varios de sus familiares y de sus guardaespaldas.

La actividad tuvo como preámbulo un corto discurso del presidente colombiano, Iván Duque, en el que aseguró que la implosión del edificio es el triunfo de la “cultura de la legalidad”.

Tras los aplausos y las lágrimas que brotaron en los asistentes, quienes entre la nube de polvo que dejó la implosión festejaron tener “la ilusión de un nuevo principio”, la música fue el vehículo que bajó el telón del “Medellín abraza su historia” con la presentación de los cantantes Juanes y Yuri Buenaventura y de la agrupación Son Batá, en compañía de la Orquesta Filarmónica de Medellín.

En la ciudad, además, se inauguró una serie de obras de arte, ubicadas en puntos simbólicos en los que el narcoterrorismo de Escobar dejó su huella y que harán parte del “Tour de la Memoria”, una apuesta por contar la historia de Medellín desde la mirada de las víctimas del capo.