Militares apoyarían sólo cinco años más; diferendo podría romper acuerdos

La mesa tripartita de negociación integrada por el gobierno federal, los senadores de Morena y el bloque opositor en el Senado acordó que las Fuerzas Armadas se mantendrán en labores de seguridad pública sólo cinco años más y que desde la Constitución se trazarán los lineamientos de la ley que dará vida a la Guardia Nacional.

Sin embargo, están entrampados en puntos que pueden llevar a romper todos los acuerdos, porque el gobierno insiste en un mando civil-militar para la Guardia Nacional y la oposición exige uno civil; además, el tiempo de vida de la Guardia Nacional y el uso de armamento exclusivo del Ejército.

De acuerdo con la información obtenida anoche con los senadores de todos los partidos, luego de cinco horas de negociaciones y de que acordaron llevar a consultas las posiciones que quedaron como irreductibles, el PAN dejó en claro en la mesa que si el gobierno federal y Morena no aceptan un mando sólo civil para la Guardia Nacional, votarán en contra en el pleno, pese a que se les hayan aceptado el resto de planteamientos.

Esta posición del PAN, según el relato compartido con un Diario de circulación nacional, generó que el coordinador de los senadores de Morena, Ricardo Monreal, recordara que en un proceso de negociación se gana y se pierde; se cede y se obtiene y que para Morena y el gobierno federal es irreductible que el mando de la Guardia Nacional sea mixto; es decir, que participen los militares; además, dijo que la apuesta oficial no es una Policía Federal bis; sino un nuevo cuerpo de seguridad que en verdad sea efectivo.

El escenario planteado hacia el final de la mesa de negociación, en la que estuvieron presentes integrantes de la Consejería Jurídica y de la Coordinación de Asesores de la Presidencia de la República, de las secretarías de Gobernación y de Seguridad Pública y Protección Ciudadana, generó el escenario de que todos los avances se pueden venir abajo y que Morena busque mañana la aprobación del dictamen en los términos en que quedó ayer en primera lectura ante el pleno.

Los temas que ya fueron acordados por todas las partes son los referentes a que se respetan los compromisos internacionales en materia de derechos humanos, de ahí que en el transitorio solicitado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, para que las Fuerzas Armadas continúen en labores de seguridad pública, mientras nace la Guardia Nacional, será de un máximo de cinco años.

Otro acuerdo es que las labores de la Guardia Nacional no serán invasivas de los ámbitos estatales y municipales; es decir, que se respetará el principio de Federación y se trabajará en función de coordinación entre las autoridades de los tres niveles de gobierno.

Un tema más es que los elementos de la Guardia Nacional serán servidores públicos con fuero civil y se deja en claro el compromiso de la mejora de los cuerpos policiacos estatales y municipales.