El activista y ecologista, Carlos Covarrubias Rendón señaló que se espera una confrontación entre desarrolladores y empresarios de la Minera México, quienes llegaran a un acuerdo y los únicos afectados como siempre serán las personas que compraron alguna vivienda en las inmediaciones de la Planta de Zinc.
Esto, luego de que la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) autorizó a la Industrial Minera México (IMMSA) una ampliación a su permiso para operar su refinería electrolítica de zinc, ubicada en la mancha urbana del poniente de San Luis Potosí, durante otros 50 años más, por lo que su cierre definitivo sería hasta el 2067.
«Fue una farsa, un fraude porque hubo un acuerdo en Cabildo capitalino en el 2009 para que cerrar operaciones en la Minera México, yo era regidor, se estableció el desmantelamiento de los tanques en un lapso de 5 años, cosa con la que jamás se cumplió y ahora reanudarán operaciones contaminando», dijo Covarrubias Rendón.
Indicó que con esta ampliación de operaciones lo que se espera es una confrontación entre constructores y empresarios de Minera México, «quienes finalmente van a llegar a un pacto como ha sucedido durante décadas pero que esto no debería de suceder».
Añadió que la minería en México tiene más de 100 años y no se han tomado medidas radicales para evitar su funcionamiento e impedir que siga dañando el ecosistema en la capital potosina, y en todo en el estado.
«Los gobiernos si no se actúa contra minera México que aparte de que son represores desde la perspectiva también son como empresa minera una de las más contaminantes en el mundo», aseveró.