Ataque en Cachemira mata a 12 soldados de la India

Las fuerzas de seguridad de la India sufrieron hoy el peor ataque en casi dos décadas en la Cachemira india, con un atentado perpetrado con un coche cargado de explosivos contra un convoy policial, en el que murieron al menos 37 agentes.

La acción tuvo lugar a primera hora de la tarde a unos 20 kilómetros de la capital regional, Srinagar, cuando, según fuentes policiales consultadas por Efe, un atacante suicida detonó un vehículo cargado de explosivos al paso de un convoy formado por varios autobuses de la Fuerza Central de Policía de Reserva (CRPF). La potente explosión, que dejó el coche que conducía el terrorista completamente calcinado, afectó a al menos uno de los autobuses que transportaban a las fuerzas de seguridad.

«Un artefacto artesanal explotó en el momento en que pasaba un convoy de la CRPF (Central Reserve Police Force)», dijo a la AFP un oficial de esta fuerza paramilitar, Munir Ahmed Khan, asegurando que no conoce el número de heridos, que todavía se estaban evacuando.

 En un mensaje en la red Twitter, el primer ministro indio, Narendra Modi, apuntó que «el sacrificio de nuestro valiente personal de seguridad no será en vano». De acuerdo con Modi, el ataque fue «abominable».

La agencia de noticias Press Trust of India (PTI) apuntó que el número de muertos ascendería a 39, al tiempo que otros reportes de prensa mencionaban 40 víctimas fatales.

De acuerdo con PTI, algunos de los cuerpos recuperados en el local de la explosión estaban en condiciones tales que las tareas de identificación tomará tiempo.

La policía tampoco reveló en la nota de manera oficial si se había inmolado un insurgente, al asegurar que todavía se investigan las circunstancias exactas de la explosión.

El atentado fue reivindicado por el portavoz del grupo terrorista Jaish-e-Mohammad (JeM), Muhammad Hassan, a través de un comunicado enviado a la agencia local Global News Service (GNS).

Hassan aseguró que «docenas de vehículos de las fuerzas de seguridad fueron destruidos en el ataque» e identificó al suicida que llevó a cabo el atentado como Aadil Ahmad.

Poco después, el JeM difundió un video de más de diez minutos de duración en el que aparece supuestamente Aadil Ahmad, alias Waqas, en unos imágenes filmadas poco antes de que cometiese el ataque.

Tras revelarse la identidad del insurgente, miles de personas se trasladaron al pueblo natal de Ahmad, Kakapora, en señal de apoyo al atacante, lo que desencadenó choques con la Policía, que optó por cortar Internet en el sur de Cachemira para reducir los llamamientos a la protesta, dijeron a Efe fuentes policiales y vecinos de la zona.