Dak Prescott sabe que está ante su segunda oportunidad de mostrar que puede ganar en playoffs, como ha enseñado en temporada regular.
El joven quarterback de los Cowboys jugará su segunda postemporada en tres años de carrera profesional, cuando este sábado por la noche se enfrente a los Seattle Seahawks en la ronda de comodines de la postemporada.
“Creo que significa todo“, respondió Prescott, al ser cuestionado sobre la importancia en su carrera de ganar en playoffs.
“Nunca pongo atención a ninguna estadística, salvo la de ganados y perdidos. Cuando hablas de éxito de un quarterback, siempre depende de lo que hagan en la postemporada. Creo que ahí es donde nos ganamos el cheque que nos escriben cada dos semanas o donde algunos hacen su dinero».
Incluso, Prescott reconoció que siempre será evaluado por el desempeño de su equipo en los partidos de eliminación directa, como sucedió en su año de novato, cuando enfrentó a los Green Bay Packers en la ronda divisional, después de que los Cowboys habían dominado de punta a punta la Conferencia Nacional.
“Estoy muy motivado por la oportunidad de regresar a los playoffs, después de faltar el año pasado», agregó el quarterback de Dallas este miércoles. “Pero nuestro trabajo es ganar sin importar lo que suceda y sin importar cómo juguemos de manera individual. Al final del día, se trata de terminar el trabajo».
Prescott llega en ritmo, luego del que para muchos ha sido uno de los mejores partidos de su carrera, en la victoria contra los New York Giants, a los que completó 387 yardas y cuatro pases de touchdown, sin intercepción.
Más importante, dirigió su décimo cuarta serie ofensiva para ganar el partido al final; más que ningún otro quarterback en la historia en sus primeras tres temporadas en la NFL.
Es el primer quarterback en la historia de los Cowboys que juega todos los partidos como titular en sus primeras tres temporadas; algo que ni Roger Staubach, ni Troy Aikman, quienes se combinaron para cinco campeonatos de Super Bowl, lograron.
“Dak nos motiva cada vez que estamos allá afuera», dijo el receptor Amari Cooper. “Tan pronto como estamos en el campo a la ofensiva, nos da la mano a todos. Nunca había visto eso antes. Es algo muy bueno y único en él. Como he dicho antes, Dak es un ganador».
Prescott dista de tener las mejores estadísticas, pero tampoco sale con las peores. Su falta de consistencia, en particular precisión, es evidente. Pero sus mejores números son en la tabla de posiciones en ganados y perdidos.
Desde 2016, sólo el quarterback de los New England Patriots, Tom Brady, ha ganado más partidos (32) que Prescott en esa posición titular en toda la NFL.
Esta semana enfrentará a otro quarterback joven, de los que lideran su generación, Russell Wilson, de los Seahawks, quien en sus primeras tres temporadas profesionales llevó a su equipo al Super Bowl dos veces.
“No me importa qué tanto me quiera la gente», dijo Prescott, de 25 años. “Éste es mi trabajo. Estoy adentro y voy a aprovecharlo al máximo. No es mi trabajo salir al campo y probar esto o el otro… Si tengo que probar algo a alguien es a los muchachos dentro de este vestidor“.