- Solari dirigirá su primer final cuando el Real Madrid se enfrente al Al Ain.
Santiago Solari dirigirá este sábado su primer final cuando el Real Madrid se enfrente al Al Ain de los Emiratos Árabes Unidos este sábado en Abu Dhabi en el choque que decidirá al campeón del Mundial de Clubes.
Para él, la oportunidad de ganar ese título que le falta para ganar crédito como entrenador de un equipo de elite y mitigar el escepticismo con que ha sido visto desde que tomó las riendas del equipo el 30 de octubre en un acelerado ascenso desde el banquillo del Real Madrid Castilla.
Para sus jugadores, la de hacer historia cosechando el tercer campeonato al hilo del torneo de la FIFA. Una gesta “sin precedentes” a la que en la opinión del entrenador, no se le ha dado “el justo valor”.
“Que el Real Madrid refrende el valor de haber ganado la última Champions con el tercer Mundial consecutivo que es algo excepcional a lo que hay que dar su justo valor. Sería un gran broche para todos estos jugadores que han estado en tres Champions, algunos en cuatro, y tres Mundiales consecutivos. Algo sin precedentes y que es muy difícil de repetir”, dijo Solari en rueda de prensa previa al último entrenamiento de su equipo de cara al encuentro.
Y es que la temporada del Real Madrid ha sido tan irregular que no da la sensación de poder permanecer en la cima mucho más tiempo. Lo peor vino en los primeros dos meses, en que el equipo vio su peor registro goleador en el siglo XXI e hiló cinco partidos sin ganar, incluida una goleada 5-1 en el clásico ante Barcelona que acabó de sentenciar a su antecesor en el cargo, Julen Lopetegui.
Desde el 29 de octubre en que Solari se hizo cargo del equipo el equipo ha mejorado, pero no lo suficiente para dar esperanzas. Ha sido bajo su guía en que el equipo logró hilar cuatro victorias consecutivas por primera ocasión en la campaña, con una cuota goleadora aceptable con 30 goles en 12 partidos y una ligera mejoría en defensa, con solo diez tantos encajados.
Sin embargo, ha batallado para vencer por la mínima a los sotaneros de la Liga y ha caído dos veces por goleada 3-0 ante rivales de menor envergadura.
Madrid ha dejado de ser favorito en prácticamente todas las competiciones en las que participa a pesar de encontrarse a cinco puntos del líder Barcelona en la Liga, estar clasificado a los octavos de Champions League y haber asegurado su lugar en la misma ronda de la Copa del Rey con comodidad.
El Mundial de Clubes – y solo tras vencer al Kashima Antlers por 3-1 en la semifinal – es el único torneo en el que el Madrid se ve como favorito al título.
Para Solari no es ninguna sorpresa que a su equipo se le dé por muerto. “es lo mismo que se decía el año pasado y el anterior”, afirmó el técnico antes de recordar que dirige casi a la misma plantilla que ganó tres Champions League consecutivas. Algo que repite una y otra vez prácticamente desde que llegó.
“Lo que es imposible es ganar las próximas 200. Esto es futbol; competencia. Compiten los grandes equipos del mundo. Me da la sensación que nos cuesta todo darle el justo valor a lo que ha conseguido el Real Madrid los últimos cinco años. Es parte de nuestra manera de ser como club tratar de conquistar la siguiente pero no puedes dejar de mirar la excelencia delo que conseguiste.
No te puedes dormir en los laureles, por supuesto, pero no se puede olvidar. Es extraordinario. Y mañana tenemos la oportunidad de dar un paso más”, reiteró.
Ante la creciente especulación con un posible regreso de José Mourinho al banquillo del Real Madrid tras ser despedido del Manchester United, el capitán del conjunto merengue, Sergio Ramos, ha pedido respeto para su actual entrenador, Santiago Solari, quien tomara las riendas del equipo a finales de octubre.
“Si yo no soy nadie para decidir quién viene. ¿Tú crees que los capitanes decidimos quién pasa por el Real Madrid? Llevamos cinco años sin Mou y seguís hablando de él porque da marketing.
“Hay que tener un respeto para el actual entrenador y los que han estado y no se le tiene. Seguiremos hablando de Mou y yo no entro en ese juego”, señaló el defensa andaluz en rueda de prensa previa al último entrenamiento del equipo merengue de cara a la final del Mundial de Clubes ante el Al Ain de los Emiratos Árabes Unidos.
Ramos, no obstante, sí que expresó su opinión en torno al tipo de entrenador que debía llegar a la casa blanca tras la dura derrota en el clásico frente al Barcelona (5-1) que acabó de sentenciar a Julen Lopetegui.
Antoino Conte era en ese momento el mejor colocado para llegar al banquillo, pues la directiva tenía como prioridad fichar a un entrenador con “mano dura”. Ramos fue contundente. “El respeto se gana, no se impone”, señaló entonces en la zona mixta del Camp Nou, y lo ha reiterado dos meses después.
“Yo cuando hablé del respeto no fue definido al futbol, lo digo por la vida en general. Te tienes que ganar el respeto no imponerlo. Le pasa a los profesores con sus alumnos también. Hemos tenido muchos entrenadores y nadie se niega nunca a hacer nada. El Real Madrid ha tenido todo tipo de entrenadores. No podemos estar dándole vuelta a lo mismo todo el tiempo”, comentó.
Aunque remota, la posibilidad de un regreso del portugués a la casa blanca no es descabellada. Ya desde el verano pasado, tras la marcha de Zinedine Zidane, la directiva del Real Madrid tenía al técnico, quien dirigió al equipo entre 2010 y 2013, como una de las opciones para sustituir al francés. Si no hubo un acercamiento fue en gran parte porque el técnico estaba comprometido con el Manchester United.
Ha trascendido que la idea no seduce a gran parte de los jugadores que llegaron a coincidir con él, entre ellos Sergio Ramos.