Aburrido primer capítulo

  • Un empate ríspido a cero goles fue el resultado de el primer partido de la final, La Máquina y las Águilas dejaron todo para el domingo

La Final de Ida del Apertura 2018 terminó con un 0-0 lleno de paradojas, luego de que el árbitro le perdonó un penal a Cruz Azul, que a su vez perdonó al América con gol cantado en los últimos minutos que terminó en el travesaño.

Los asistentes a la cancha del Estadio Azteca se tuvieron que conformar con aplaudir las pocas oportunidades que se generaron al ataque o festejar las intervenciones de los arqueros, que cuando se les necesitó aparecieron para mantener su marco en blanco.

La primera fue de Agustín Marchesín, quien se lució con un lance al minuto 9, para evitar que un cabezazo del Cata Domínguez se incrustara en su marco. La segunda fue de Chuy Corona, que aguantó firme un disparo bravo de Mateus Uribe dentro del área grande, ahogando el grito de gol de los aficionados azulcrema.

Las constantes faltas provocaron un juego sumamente pausado, en el cual ninguno de los equipos arriesgó de más para buscar la victoria.

Al minuto siete la polémica arbitral se hizo presente cuando ni Fernando Guerrero, árbitro central, ni el VAR, vieron una falta de Igor Lichnovsky sobre Bruno Valdez dentro del área, ante los fuertes reclamos de Miguel Herrera desde la banca, que tuvo que hacer dos cambios obligados por las lesiones de Mateus Uribe y Roger Martínez.