Una etapa de egoísmo

  • Julieta Venegas afirma que por ahora no tiene deseos de grabar un disco, prefiere enfocarse en reinventar su relación con la música.

El 14 de agosto de 2015 salió a la luz Algo sucede, el que hasta ahora es el último disco de Julieta Venegas y la mexicana no tiene prisa por aumentar el número de álbumes inéditos en su carrera.

De momento, asegura, se está tomando la vida con calma y aprovechando esa rela­ción que desde hace más de dos décadas ha cultivado con la música.

La cantante señala que para ella, por ahora, es indispensable ser egoísta y conservar sus canciones para ella. Por eso afirma que no tiene ganas de entrar a un estudio de grabación y prefiere concentrarse en pequeños recitales en Buenos Aires (Argentina) –lugar en el que actualmente reside–, en su familia y en escribir lo que le plazca.

“Estoy tocando, pero tengo ganas de hacer cosas más pequeñas. Estoy recuperando una relación con la música que, de alguna manera al hacerla tan profesional, perdí. Ahora estoy recuperando la intención, las ganas, estoy volviendo a mi esencia, recu­perando las ganas de volver al escenario, de tocar el piano, de ver a la gente.

Tenía ganas de olvidarme un tiempo y desarrollarme en cosas más chicas, escribir, pero ahorita no tengo ganas de grabar, quiero escribir, es todo un proceso para mí”, dijo vía telefónica.

Dijo no estar segura si la vorágine en la que se sumergió durante la pasada década afectó su manera de concebir la música, de lo que sí, es que quiere probar cosas nuevas para enriquecer su trabajo.

“No sé si llamarlo ‘afecta­ción’ (sic) porque siempre van a haber cambios, porque ni siquiera pienso qué hubiera pasado si los discos no hubieran funcionado. Está bueno que las cosas pasen, saber que si tienes una vocación real –la mía lo es–, se vale decir que estás harto, porque hay distintas etapas y yo ahorita estoy en una muy egoísta.

Ahora quiero tocar el piano, en la que se me antoja subir a un escenario y tocar canciones nuevas. Quiero hacer otras cosas, estoy trabajando con un amigo poeta, musicalizando una obra de teatro, estoy probando cosas nuevas que de alguna manera no me dejen estar en la vorágine que significa la carrera”, indicó.

Además, la edad de su hija Simona también es un factor para este retiro voluntario de los grandes escenarios. Julieta afirma que quiere tener la oportunidad de acompañar a su hija en sus actividades diarias.

“Quiero estar con mi hija, dis­frutar a mi pareja, poder llevarla al karate, a la escuela. Es mucho más chico lo que estoy haciendo, pero al mismo tiempo me siento muy libre, feliz, me estoy dando chance de hacer lo que quiero y lo que tengo ganas. Si voy a hacer una gira, quiero que todo madure, no quiero meterme a un estudio, grabar mis nuevas canciones, quie­ro que por ahora sean mías”, afirmó.

A pesar de su libertad creativa y personal, Julieta se­ñala que sus fans le reclaman, pero por ahora su prioridad es ella.

Los fans me reclaman, porque ven estos shows pequeños que hago en Buenos Aires, pero creo que les da gusto que estoy haciendo esto para mí, un proceso que tenía que vivir, en mi romance con el piano y la música. La última gira fue muy pesada y tenía ganas de no viajar y ver qué pasa, que la música fuera mi refugio”, insistió.

Pero el tener este tiempo libre también significó el pla­cer de conocer y convivir con Charly García. El encuentro se dio porque Julieta es la conductora de BIOS: Vidas que marcaron la tuya, de NatGeo, cuyo capítulo de este domingo es la biografía del famoso músico argentino, el cual se estrena este domingo a las 21:00 horas.

“Me pareció súper lindo porque él todo el tiempo fue buena onda conmigo, además fue una experiencia rara en cierta forma porque los del documental no querían que nos conociéramos fuera de cámara. Yo estaba nerviosa y más por no poderlo conocer antes, pero cuando llegué comenzamos a tocar el piano, me recibió en su casa y lo hicimos para romper el hielo porque yo quería que supiera que esto es realmente importante para mí.

Se vale ser fan y más por­que él también es fan de mucha gente, hablamos de Paul McCartney, de Prince, sobre Joe Mitchell, entonces estuvo buenísimo porque yo tam­bién soy fan de los artistas. Era muy chistoso este juego”, finalizó.