Luego de que el abogado de Joaquín El Chapo Guzmán, Jeffrey Lichtman, afirma que los presidentes Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto recibieron sobornos del Cártel del Pacífico, el extitular del CISEN (2006-2011), Guillermo Valdés, calificó las declaraciones como sensacionalistas y con faltas de pruebas.
En entrevista con Pascal Beltrán del Río, en Imagen Radio, explicó que mientras la defensa del narcotraficante no presente pruebas en torno a las acusaciones, éstas sólo quedan en un dicho.
El también analista en temas de seguridad explicó que si bien los grupos delictivos compran a la estructura de las autoridades locales y algunos han logrado escalar en el nivel de corrupción, no existe algo que avale que esto haya llegado hasta la presidencia.
Sí hay mucha complicidad y corrupción a nivel local; es decir, se corrompen a las estructuras policías territorialmente, aunque hay organizaciones que han llegado a niveles más altos. No hay ningún documento que avale que la corrupción ha llegado a la presidencia. Los presidentes no tienen necesidad de hacer eso”, afirmó.
Reiteró que las declaraciones del abogado de Guzmán Loera, ayer, durante el juicio en Brooklyn, Nueva York, y mismas que fueron desmentidas por el exmandatario Calderón Hinojosa y el equipo de la actual presidencia, no tienen pruebas que las sustenten.
“Son declaraciones sensacionalistas, para exculpar a El Chapo, pero carece de fundamento”, dijo.
Ayer, Lichtman aseguró además que el líder real del Cártel del Pacífico es Ismael El Mayo Zambada, y no El Chapo como se ha dicho, y que es quien, presuntamente, ha pagado sobornos a presidentes de México, así como a autoridades federales.
«El actual y anterior presidentes de México recibieron cientos de millones de dólares en sobornos; los soborna hoy. Lo cierto es que (Guzmán) no controlaba nada; Zambada lo hacía”, aseveró para acusar al gobierno mexicano de usar a El Chapo como “chivo expiatorio”.
Frente a ello, Valdés Castellanos explicó que sólo quien esté dentro de dicha organización criminal puede saber quién lideraba; no obstante, como menciona en su libro La Historia del Narcotráfico, ambos personajes formaban parte de “una dirección colegiada” que manda en el grupo.
“Nadie que está fuera podemos halagar sobre quién era el mero mero, aunque es innegable que los dos son parte”, dijo.
El ex titular del CISEN comentó en el programa radiofónico Primera Emisión que Guzmán Loera, quien enfrenta 17 cargos, podría reducir la condena que reciba si aporta más información a las autoridades estadunidenses sobre la estructura criminal y de corrupción del Cártel del Pacífico, aunque para ello ésta tendría que ser verificada.
“La gran palanca de las autoridades para seguir la investigación es negociar la condena y el juicio al que manden a El Chapo. La información la tendrían que verificar y una vez eso, reducen la pena o la prisión”, aseveró.