La corrupción es el principal lastre que enfrenta México y nuestras instituciones son endebles para enfrentarla, por eso tenemos el deber como sociedad de respaldar el propósito del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, de combatir de raíz este flagelo, aseguró Ernesto Canales Santos, primer fiscal anticorrupción del país en Nuevo León.
“El primer elemento para vivir en un Estado de derecho es que la ciudadanía esté convencida de que debe cumplir la ley, el cumplimiento voluntario de la ley es la base de una convivencia sana, si la ley se tiene que imponer, se debe de hacer para mantener el Estado de derecho, pero debe ser la excepción”, apuntó.
El autor del libro ¿Cómo nos arreglamos? Testimonio del Primer Fiscal Anticorrupción de México (Grijalbo 2018), comentó que la interrogante que plantea el título sintetiza el problema, es decir, cómo hacemos frente a la corrupción y al mismo tiempo es la frase distintiva en la ciudadanía sobre este problema.
“El primer sentido es de cómo nos arreglamos, ¿De a cómo? Pero, el otro es: estando la situación como está, como país, cómo nos arreglamos, cómo arreglamos esta crisis de credibilidad”, planteó.
Relató, en entrevista con un Diario de circulación nacional su tarea para combatir las prácticas indebidas y de sobornos en Nuevo León y estableció que como sociedad no nos podemos resignar a pensar que la corrupción es un tema cultural, porque entonces nos tendríamos que acostumbrar; planteó que la corrupción es una práctica generalizada, pero porque el gobierno no la ha perseguido.
“Si cultural lo tomamos como generalizado, pues hay que aceptarlo, porque si hay la percepción, al menos, es porque tampoco hay estudios, no hay datos duros, precisamente porque son operaciones oscuras, pero la percepción es de que la corrupción es sumamente generalizada.
“Si hacemos la pregunta siguiente: ¿por qué es una práctica generalizada? Inmediatamente, caemos: ¡Porque no se ha perseguido!