La pasada administración municipal incurrió en irregularidades, debido a una gran red de corrupción con gallardía, compraron lo que querían, donde querían, al precio que querían y con quien se les diera la gana, denunció el Secretario General del Ayuntamiento, Sebastián Pérez García, quien reafirmó el compromiso del actual Gobierno de esta capital de no más proveedores fantasmas, pagos a discreción fuera de la ley y demás prácticas en detrimento de las arcas municipales.
De la misma manera, dejó en claro que se procederá con todo el peso de la ley contra quien o quienes resulten responsables, además se les dará seguimiento de toda esta situación ante dependencias como la Auditoría Superior de la Federación y por supuesto, la Auditoría Estatal.
Expuso el caso de la proveedora de medicamentos en el trienio anterior, Sandra Sánchez Ruiz, a quien se le facturaron más de 53 millones de pesos, de los cuales se le pagaron más de 44.5 millones, y aunque se cancelaron varias facturas por más de 5.8 millones de pesos, aún se le deben más de 3.3 millones de pesos. Sin embargo, cabe destacar que en los archivos, no se tiene contrato alguno firmado con el Ayuntamiento.
No obstante, Pérez García dijo que el asunto de Sandra Sánchez Ruiz es tan sólo una de las muchas irregularidades ya que en la mayoría de las contrataciones que se hicieron, durante la pasada administración capitalina se abusó de la adjudicación directa “haciendo de ésta una práctica cotidiana y se faltó a los principios de transparencia y eficiencia económica”. Remarcó.
Añadió que en una administración pulcra con transparencia, deben de seguirse 13 pasos en el proceso de compra o pago, pero en la gestión anterior se llevaron a cabo malas prácticas recurrentes como la colusión para establecer precios fuera del mercado, deficiencias de calidad e incluso, entregas simuladas, “lo que nos obliga a identificar el total del monto de todas estas acciones para iniciar las rutas jurídicas, administrativas y penales”.