Sergio Mayer instala la Comisión de Cultura con show

La primera propuesta concreta de Sergio Mayer como presidente de la Comisión de Cultura y Cinematografía de la Cámara de Diputados se conoció ayer: cambiarle el nombre al grupo por el de Comisión de las Culturas y Cinematografía. Dos intenciones más comenzó a esbozar, aunque nunca dijo cómo las llevará a cabo: la redistribución de “la riqueza cultural que tiene nuestro país hacia los sectores más desprotegidos” y “dar impulso a la economía creativa”.

Mayer instaló ayer la Comisión de Cultura tras la polémica que suscitó su llegada al órgano legislativo. Lo hizo acompañado del resto de los diputados que la integran: 16 de Morena, su partido; cinco del PAN, tres del PRI y diez de otros tres partidos. Los ausentes fueron el presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Porfirio Muñoz Ledo, y el coordinador de Morena, Mario Delgado.

Otros invitados del diputado sí llegaron y para ellos tenía un espectáculo preparado: cuando cada grupo parlamentario fijó su postura, Mayer preguntó si alguien más quería tomar la palabra. Un cantante sentado a la mesa pidió el micrófono y comenzó a sonar La Traviata, ante el pasmo general. Aparecieron más cantantes. “Les ofrezco una disculpa por haber roto el protocolo. Es un regalo”, dijo Mayer; los músicos volvieron a cantar México en la piel.

Ése fue el segundo acto de comunión de la comisión; antes, la mayoría de los diputados ya había externado su júbilo de pertenecer a ella; otros volvieron al discurso de siempre: “nunca más la cultura será un elemento accesorio”; unos más, incluso, le dijeron ahí mismo a Alejandra Frausto, la próxima secretaria de Cultura, que será un honor ser “abanderados” por ella. Frausto nuevamente fungió como invitada, a su lado permaneció la senadora Susana Harp y el que será titular de Cultura en la ciudad, Alfonso Suárez del Real.

También estaban ahí muchos de los que suenan para formar su equipo de trabajo: Lucina Jiménez, Marina Núñez Bespalova, Grace Quintanilla y Pável Granados. Pero en esta ocasión, Frausto prefirió no ser protagonista y en su lugar, salió huyendo del sitio: como si se tratara de una estrella de rock, la próxima secretaria de Cultura fue sacada por dos guardias de seguridad.

El que tampoco quiso opinar fue Ricardo de la Peña, diputado del PES: “Me abstengo de la respuesta…”, dijo entre sonrisas cuando se le preguntó sobre las cualidades que ve en Sergio Mayer.