Si operó la presión para detener el otro gran asalto a la Nación

El mandatario federal Enrique Peña Nieto, aunque parece que ya vacaciona y cobra su sueldo del erario público; en realidad sigue en su afán de vender al mejor postor los recursos de la nación.

Ya las telecomunicaciones, las vías terrestres, la explotación del petróleo en suelo nacional, y hasta la mano de obra; todo se abarata al mejor postor.

En tanto a la privatización de las aguas nacionales que avanza a pasos agigantados, el día de ayer 15 de octubre marcaría otra fecha de vergüenza para la presente Administración.

Por más explicaciones que se dieron sobre los decretos en el uso de las cuencas nacionales el pasado 6 de junio y promulgados por Peña Nieto, el hecho es que sí se prosperaba en la privatización de nuestro líquido más vital, al marcar como fecha para entrar en vigor  el sistema Conagua Digital para permitir que los intereses privados se apropien de los recursos acuíferos para su distribución y cobro a toda la población.

Sí ya es un infierno recibir las boletas bimestrales de cobro de agua marcadas con cantidades cada vez más impagables, sin posibilidad real de aclaraciones, a menos claro que se inicie un proceso legal tardado, tedioso y costoso, mismo que el ciudadano siempre pierde frente al  Estado; se agranda aún más la desigualdad entre el ciudadano y el empresario.

Citar al artículo cuarto constitucional en el que se señala que toda persona tiene derecho al acceso, disposición y saneamiento de agua para consumo personal y doméstico en forma suficiente, salubre, aceptable y asequible, así como que el Estado garantizará este derecho y la ley definirá las bases, apoyos y modalidades para el acceso y uso equitativo y sustentable de los recursos hídricos, estableciendo la participación de los tres niveles de gobierno y de la ciudadanía; al final no garantiza que nuestras cuencas hídricas no se privaticen aún más.

Mientras millones de mexicanos sentimos en carne propia un futuro –ya no propio, sino de nuestros hijos— cada vez más agreste, salvaje y difícil ante las políticas de Estado, a Peña Nieto le da para ponerse a divagar y abrevar en mostrarnos el grado de su cultura, que igual no rebasa algunos pasajes de la Biblia, para intentar desviar la atención del intento por consumar el otro gran asalto a la Nación.

También ayer, 15 de octubre, Peña Nieto subió a su cuenta de Instagram, una imagen en la que aparece con un sombrero y la acompañada con el texto: “Un país que invierte en infraestructura está invirtiendo en el desarrollo y el progreso de su sociedad. Eso es justamente lo que impulsamos durante estos 6 años para México”.

La usuaria de la misma red social, @danielaheez hizo referencia a la canción “Sálvame” del grupo RBD –en donde participaba Anahí, la ahora esposa de Manuel Velasco, gobernador de Chiapas–, a lo que el mandatario respondió: “@danielaheez estoy hecho a tu voluntad”, otro fragmento de la canción.

Así entre baladas y quién sabe qué más, festeja.

Pero al final la presión, lo hizo intentar postergar el asalto.

Acta Divina… “Debido a que el nuevo sistema Conagu@-Digital requiere de manera obligatoria contar con la FIEL, emitida por el Servicio de Administración Tributaria (SAT), y que algunos de los usuarios de aguas nacionales no cuentan con ella, hoy se decidió emitir un acuerdo para postergar el inicio de operaciones del sistema por seis meses, con el fin de permitir a todos los usuarios que no cuenten con ella realizar los trámites necesarios para obtenerla”.

Para advertir… Tienen intereses que cumplir, y no son los de los ciudadanos.