Ministros de Venezuela y Brasil evalúan crisis migratoria

Los ministros de Defensa de Venezuela y Brasil sostuvieron un sorpresivo encuentro en el que abordaron la migración masiva de venezolanos, hecho que ha generado tensiones en sus fronteras.

El general Vladimir Padrino recibió a su homólogo brasileño, Joaquim Silva, en la ciudad venezolana de Puerto Ordaz, dejando de lado el conflicto, a menudo agresivo, entre ambos gobiernos. Padrino dijo que trató con Silva “el asunto del movimiento migratorio” de venezolanos hacia el estado brasileño de Roraima, al Norte, debido a la grave crisis económica del país petrolero.

Caracas denunció que ese éxodo ha generado brotes de xenofobia. “Venezuela no es un país con vocación migratoria hacia Brasil. Su movimiento migratorio es por razones que tienen una causa: la guerra económica para derrocar a un Gobierno legítimo”, dijo el ministro venezolano junto a Silva.

Unos 30 mil venezolanos viven en Roraima, Estado de 575 mil habitantes, según cifras oficiales brasileñas.

El Ejército de Brasil, junto al Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), mantiene una operación de acogida de inmigrantes, pero los albergues son insuficientes y muchos acampan en las calles de la ciudad de Boa Vista.

“Fue una reunión de trabajo y camaradería para tratar temas referentes a defensa y elevar el nivel de relaciones entre nuestras fuerzas armadas”, apuntó Silva.

Además, Padrino pidió facilitar la repatriación de sus conciudadanos como parte de un programa del presidente Nicolás Maduro, que ha llevado de vuelta a casi cuatro mil migrantes desde varias naciones de la región. Confirmó que dos mil 365 personas han retornado desde Roraima.

También reiteró que en Venezuela no hay una crisis humanitaria y que tal argumento se utiliza en organismos internacionales para “agredir” e “intervenir” el país.

Según la ONU, 1.6 millones de venezolanos se fueron desde 2015 ante el colapso económico, del que Caracas culpa a Estados Unidos.