- Bastian Dankert cobró una falta insólita a Ribery dentro del área y nadie lo contradijo. Lewandowski erró, Robben metió en el rebote pero el VAR lo hizo patear nuevamente por invasión.
El Bayern Munich, con su nuevo entrenador Niko Kovac en el banquillo, abrió la Bundesliga con una victoria por 3-1 ante el Hoffenheim, en el partido inaugural que tuvo momentos de intensidad y dureza.
El Bayern controló el partido desde el comienzo, aunque se encontró con dificultades para llegar ante un Hoffenheim muy agresivo en la marca desde el centro del campo.
En el minuto 23, un saque de esquina lanzado por Joshua Kimmich encontró a Thomas Müller, que marcó de cabeza dentro del área chica.
En el 58′, en la segunda llegada que generó el Hoffenheim en todo el partido, llegó el empate con un remate de Adam Szalai tras regatear a Boateng dentro del área.
La situación definitiva llegó en el 78′, cuando Franck Ribery cayó dentro del área, ante una salida de Nordveit en una situación en la que el árbitro no consideró necesario consultar el VAR.
Primero Baumann paro el cobro de Lewandowski y Robben marcó tras recoger el rebote, pero el penalti se repitió, con intervención del VAR, por invasión de área del holandés.
Completó el resultado (3-1) el holandés Robben aprovechando una distracción de la defensa del Hoffenheim que ya estaba en otra cosa. Había abierto el marcador Tomas Müller para el BM y el empate transitorio para la visita lo convertía Adam Szalai. En el segundo cobro Lewandowski no falló y puso en ventaja al equipo 2-1.
Después el Bayern, que había tenido cerca del 70 por ciento de la posesión de balón, controló el compromiso y en el 90′, llegó el tercero con un remate de Robben a pase de Müller.