El belga Philippe Gilbert (Quick Step) protagonizó un gran susto en el descenso del Portet d’Aspet al salirse en su descenso en una curva hacia la izquierda y saltar por encima del quitamiedos.
Gilbert formaba parte de la escapada del día con 42 hombres y unos kilómetros antes, en las primeras rampas de ascenso de este puerto, lanzó un ataque y se quedó en solitario al frente de la prueba.
En un primer momento, el ciclista desapareció de imagen al saltar por encima de un pequeño muro de protección y precipitarse en una caída de unos dos o tres metros.
Una vez rescatado con algunos rasguños y aparentemente sin heridas de mayor trascendencia, el belga se volvió a montar en su bicicleta unos minutos y continuó en carrera, aunque ya había sido superado por los componentes de la escapada.