*.- El PRI busca líder *.- Es otra «rifa del tigre» *.- XNP, mala copia de AMLO

Con un fuerte discurso de autocrítica pero actuando sin concordar, esta semana vimos cómo René Juárez se volvió el Presidente del CEN del PRI que menos duró en el cargo, mientras la mexiquense Claudia Ruiz Massieu lo relevaba en el cargo y “por prelación” –es decir porque se corrieron los puestos del organigrama- Rubén Moreira la reemplazó en la Secretaría General.

Como que no es muy congruente que reconozcan su divorcio con el pueblo, o  que se perdieron las pasadas elecciones “por errores generacionales que no se quisieron subsanar”, y al mismo tiempo  integren al heredero de Humberto Moreira en la gubernatura de Coahuila, en la segunda cartera más importante del Comité Ejecutivo  Nacional.

Y si a nivel central priva la incongruencia, aquí nos empachamos de optimismo; todo mundo coincide en que el ¨PRI, se transforma o desaparece”, frase acuñada  desde que en 1985 Cauucthemoc Cárdenas Solórzano y un numeroso grupo de priistas, AMLO entre ellos, se fueron a fundar el PRD; pero pospuesta, revelando que temen una verdadera poda de lo que ya no funciona: los cacicazgos a cualquier nivel.

IMPRESENTABLE DEL CEN

La dinastía Moreira, de triste memoria, sólo puede reconocerse como uno de los más fuertes cacicazgos de Coahuila, pero aún así lo dejan como “hombre fuerte” de Ruiz Massieu en la estructura del CEN. ¿De qué se trata?

“Misma gata, sólo que revolcada” es la que se aprestan a aparentar en nuestra entidad donde, se coqueteó con satisfacer a la frustrada militancia con la salida de Martín Juárez y ahora cabildean la posibilidad de no removerlo.

Se pretende mantenerlo en el cargo pese a que para evadir la derrota culpa a la misma militancia y a que su paso por el CDE se conocerá, históricamente, como la etapa en que más derrotas tuvieron al grado de quedarse, por primera vez, sin representante en el senado.

El problema es que al parecer, ningún liderazgo acepta el encargo pues desde la semana pasada, el gobernador Juan Manuel Carreras revisó perfiles y currículos; empezó llamando a unos y terminó con todo el listado, que por cierto no es muy prolijo, sin que uno solo aceptara la vacante.

Ahora si que, coloquialmente puede considerarse al liderazgo tricolor como otra “rifa del tigre” donde solo hay lugar para chambones, burócratas y busca-chambas.

LIDER TRABAJADOR

Es así como por default, como dicen en los encuentros deportivos, Martin Juárez seguirá en el encargo hasta que salga –si es que existe y además les conviene- un mejor gallo que quiera cantar en el corral de los tricolores o bien, este partido se siga hundiendo y desaparezca, lo que pase primero.

En la etapa de recomposición a que se debe enfilar el PRI en SLP, si lo quieren tener como relojito para el próximo proceso del 2021, cuando se renovarán todos los poderes del Estado: gubernatura, diputados federales y locales además de  alcaldías; se requiere un líder de verdad, no hechizo a voluntad del Ejecutivo o de los caciques en el poder.

Un líder que sepa y pueda, unir a lo que queda del otrora partidazo, que logre convocar liderazgos que aún prevalecen al interior del Estado y sobre todo que, al estilo lópezobradorista, esté dispuesto a rendir en 3, el trabajo de todo un sexenio, porque ya están atrasados.

 Un líder capaz de llevar el barco al puerto de la victoria, incluso pasando por encima de la voluntad e intereses del primer priista del Estado quien, si bien tiene derecho a opinar en la selección de su sucesor, no tiene derecho a volverse a equivocar.

MALA COPIA

Hay tiempo aún para foguear perfiles, no para encapricharse con una definición aunque, desde fuera se vea difícil, nada es imposible si de verdad se quiere. ¿No cree usted?

Y no sin antes consignar que, como si fuera Andrés Manuel López Obrador que desde su reconocida victoria ha actuado como Presidente electo sin dejar de ser virtual gracias a sus socios del PES, lo que ahora le impide estar el lunes en la Reunión de la APEC, este lunes en Vallarta; Xavier Nava quiso amedrentar al aún Edil Ricardo Gallardo Juárez enviándole anticipadamente una ilegal Comisión de entrega-recepción que en la UAM se topó con el muro de la gallardía. Resulta que por Ley, el proceso de entrega-recepción da inicio hasta el 15 de agosto y hasta entonces la Comuna estará  dispuesta a reconocer su “Comisión de desestabilización”, así que ya pueden dejar sus gritos y sombrerazos porque “esto no termina hasta que se acaba”; aquí nos leemos el próximo miércoles.