Exhorta diputada a recurrir a organismos internacionales por políticas discriminatorias de Trump

  • Graciela Gaitán Díaz, indicó que el presidente de EEUU ha mostrado el racismo, desprecio y odio que siente por los centroamericanos y los mexicanos.

Las políticas discriminatorias e inhumanas que ha implementado el presidente de Estados Unidos de Norteamérica, Donald Trump no se van a terminar con declaraciones ni lamentaciones, por ello, es necesario hacer pronunciamientos ante organismos internacionales por parte de organismos de derechos humanos y de los gobiernos de donde provienen los afectados, dijo la diputada Graciela Gaitán Díaz.

Señaló que hoy más que nunca se requiere de oportunidades de trabajo y desarrollo para los connacionales, porque “vemos con mucha tristeza cómo sufren las niñas y los niños al ser separados de sus padres, por las políticas de un presidente estadounidense que ha mostrado el racismo, desprecio y odio que siente por los centroamericanos y los mexicanos”.

Está más que demostrado que “con cartas, pronunciamientos y declaraciones del gobierno no se logrará nada, porque Trump se siente poderoso, por ello hay que hacer señalamientos en la ONU y todos los organismos internacionales a los que México pertenece, que intervengan organizaciones de derechos humanos para que haya un cambio en esas políticas”.

La diputada Gaitán Díaz manifestó que en México hay profesionistas y trabajadores especializados que no encuentran oportunidades de empleo bien remunerado y se van a Estados Unidos y forman una familia, así como millones que se lanzan a la aventura y ahora, están sufriendo situaciones muy difíciles.

“El llamado es que ya no se vayan, que se queden en su país, en este caso los connacionales mexicanos que se queden aquí y que el gobierno federal, los gobernadores de todos los estados, generen oportunidades de empleo y desarrollo para que se queden, porque solamente van a ir a sufrir ellos y sus familias”.

La diputada Graciela Gaitán lamentó que hay campesinos que mandan el maíz blanco a Estados Unidos a tres pesos y luego el gobierno compra de regreso el amarillo mucho más caro y de baja calidad y lo mismo pasa con la piña, arroz, jitomate, se les paga una miseria y eso demuestra que las cosas no se están haciendo correctamente.