La ministra española a cargo de lidiar con el movimiento independentista catalán dijo el sábado que una reforma constitucional podría ayudar a terminar con la peor crisis política del país en casi cuatro décadas.
La ministra Meritxell Batet, quien juramentó el jueves como titular de la cartera de Administración Pública, dijo que los socialistas desean enmendar la constitución a fin de adoptar un «modelo federal».
En un evento del partido socialista Batet añadió que la estructura actual de comunidades autonómicas regionales con diversos niveles de autogobierno «ha sido un estado de éxito, y nos ha traído hasta aquí, pero necesitamos una renovación».
El gobierno regional liderado por separatistas en Cataluña, que infructuosamente intentó declarar la independencia el año pasado, es el problema prioritario para el gobierno socialista del presidente Pedro Sánchez.
Sánchez asumió el cargo la semana pasada luego de encabezar una moción de censura en el Parlamento contra el entonces presidente Mariano Rajoy, cuyo Partido Popular fue empañado por un reciente caso de corrupción que involucra a altos miembros.
RETO POLÍTICO
Enmendar la constitución española, sin embargo, requiere una mayoría de dos tercios del Congreso de Diputados en Madrid.
El gobierno de Sánchez está en el grupo minoritario y probablemente enfrente mucha resistencia a cualquier decisión para calmar a los secesionistas en Cataluña, tanto del Partido Popular como del partido Ciudadanos de centro-derecha.
España cayó en una crisis constitucional en octubre, cuando la mayoría separatista en el Parlamento de Cataluña emitió una declaración de independencia que fue considerada ilegal. El gobierno de Rajoy, con el apoyo del entonces líder de oposición, Sánchez, despidió al gobierno de Cataluña y asumió el control de los asuntos de la región.