AMLO lucra electoralmente con la corrupción

Junto con la inclusión del director del Hospital Central, Francisco Alcocer, en la lista de funcionarios que aportan facturas de empresas fantasma populares entre diputados que con ellas tapan sus chanchullos; se conocen más anomalías en el nosocomio.

Al margen de “comprar” 1.4 millones de pesos a Ismalog SA de CV, empresa que factura a diputados cobijas, enseres domésticos, malla ciclónica, despensas, materiales de construcción y otros productos que la harían todóloga y especialista en nada, las autoridades deberían analizar los medicamentos oncológicos que les “compró” Alcocer, quien ha iniciado una  presunta “descentralización” del HC para aplacar la ola de inconformidades con la distribución del edificio de sustitución recientemente iniciado.

Tan irregular es  haber demolido los 7 quirófanos jamás estrenados en los que el gobierno de Fernando Toranzo invirtió 30 millones de pesos que a nadie dieron beneficio como comprar medicamentos especializados a un proveedor tuttifruti como la empresa fantasma ya citada.

Según personal del Central, los quirófanos, a simple vista, estaban bien construidos pero jamás fueron equipados, por lo cual presumen que bien pudieron demolerlos para ocultar que esa inversión nunca existió o más bien que alguien se la quedó., asunto del que Alcocer debería rendir cuentas pues en todo momento ha estado al frente de la institución.

Hay también los que afirman que los quirófanos se demolieron simplemente porque no quedaba otra pues solo así podía hacerse el nuevo edificio pero, no lo dirían tan fácil si los 30 millones que costaron hubieran salido de sus chequeras.

Son irregularidades injustificables ante las premuras de, por ejemplo, una alumna del Cobach de Catorce que tuvo un accidente y requiere una cirugía por la que el HC cobra a sus padres 200 mil pesos y mientras sigue en Terapia Intensiva “en estado crítico”.

Fue internada desde el viernes y es hora que no logran reunir ni la cuarta parte de lo que en el HC les pidewn para atenderla, y no la operan. En las redes sociales sus padres, amigos y maestros piden donaciones pues su familia carece de recursos. ¿Usted cree que para esas personas la destrucción y desperdicio de 30 millones de pesos, no son una cachetada en pleno rostro, un agravio doloroso?

Y ese no es un caso único sino el pan diario del nosocomio donde, al final del día sentimos que son conductas inhumanas, injustas frente a dispendios millonarios, adquisiciones irresponsables e ilegales ¿Dejan morir a una adolescente por falta de 200 mil miserables pesos? ¿Son comerciantes antes que médicos? Esa es corrupción que mata.

En SLP tenemos avances sin precedentes en empleo, inversión extranjera y turismo por citar algunos, pero la obra del gobernador Juan Manuel Carreras se empaña con la inoperancia del Sistema Estatal Anticorrupción, la Fiscalía General, la Secretaría de Seguridad, que ha servido lo mismo que un cacahuate para frenar la delincuencia organizada y sin organizar, la de los influyentes políticos y económicamente poderosos, a pesar de que el fuero constitucional en SLP ya fue derogado.

Que tales instancias sean fallidas, no impiden sino hacen más contundente el juicio popular que descalifica no sólo al corrupto y al corruptor sino a todos los que se hacen de la vista gorda, como en éste caso la Secretaria de Salud, Mónica Rangel, y el de Coepris, Carlos Alberto Aguilar Acosta, que no supervisan ni meten al orden a entes como el director del Hospital Central y les permiten hacer lo que les viene en gana con el dinero de nuestros impuestos,

Qué tan jugosas serán las ganancias que para aplacar las críticas, Alcocer ya prometió “la descentralización” del Hospital Central con el traslado a un sitio cercano, de los servicios que están contemplados para la planta baja de la torre de 7 niveles que ya está en construcción.

Este otro edificio, supuestamente de cinco pisos, estará en lo que fue la primera guardería del DIF Estatal, frente al jardincito de la iglesia de Morales donde por cierto, desde inicios de mes comenzaron la demolición del viejo inmueble.

Todavía ninguna autoridad anuncia ni confirma la obra, pero ya trabajan ahí varias cuadrillas de trabajadores removiendo los escombros. A los vecinos les dijeron que ahí estarán los servicios del Seguro Popular, urgencias y hasta maternidad del Hospital Central, lo que significa que la Torre Médica de la glorieta González Bocanegra se quedaría sólo para especialidades médicas, cirugía en particular.

 

AMLO EN LA HUASTECA

 

Apenas se leían las notas informativas de la visita de Meade a Valles y Rioverde, cuando por la Huasteca Hidalguense arribó a la misma región el puntero de las encuestas en la contienda presidencial, Andrés Manuel López Obrador, de la coalición Juntos Haremos Historia que conforman Morena, PT y PES.

El tabasqueño no tiene necesidad de indagar la situación local porque tirándole a los corruptos tiene para ganarse la simpatía de muchos y nuestra Huasteca no fue la excepción. Acuérdese: prometer no empobrece, dar es lo que aniquila y, ya tendremos tiempo para ver si cumple.

Como buen tabasqueño, – la tierra del “Edén”- su discurso giró en torno a la abundante riqueza en flora, fauna y paradisiacos sitios de la zona, frente a la pobreza extrema de las mayorías, para caer en el sitio común de: Gobierno rico y pueblo pobre.

Para los que se ufanaban de que los actos del de Macuspana fueron más concurridos que los de José Antonio Meade, nos comentan que los del priísta pueden  tener más valor porque fueron bajo la tortura del pudiente sol mientras que los del de Morena se realizaron con el frescor de la tarde y noche.

El caso es que mientras la lucha anticorrupción sea sólo de papel y sus instancias no operen, por más esfuerzos que haga el candidato no superará la ira popular. Que luego no pregunten porqué el electorado le da la espalda al PRI.