Apenas a inicios del mes de marzo del presente, el candidato presidencial José Antonio Meade de la coalición Todos somos México (PRI-PVEM-NA), daba la bienvenida con beneplácito al llamado de concordia de su opositor en la contienda, Andrés Manuel López Obrador, a la vez representante de la coalición Juntos haremos historia (Morena-PES-PT).
Apenas hace 60 días, ya dentro de la contienda electoral, Meade hacía un llamado a sus contendientes a «no hacerse daño», y abundaba con la frase de que “ya suficiente tiene el país con la violencia criminal”.
«Me parece muy bueno y destacable que Andrés Manuel coincida conmigo en términos de que lo que necesita el país es concordia, es unidad, es un solo proyecto nacional, es una política que no divida, una política que genere y busque consensos, que es lo que yo he buscado hacer los últimos 20 años», señalaba Meade.
Pero el viraje hacia las campañas de odio y descalificación para enfrentarnos a los mexicanos por nuestras ideas políticas e incluso sólo por nuestras posibles y definidas opciones de voto, no tardaron en llegar; sobre todo desde el equipo del propio candidato presidencial Meade y por él mismo, quien al final no se decidió por la ruta del juego limpio democrático.
La concordia nacional no puede esperar para después de que se sucedan las elecciones y haya ganadores. La paz, la unidad, la tolerancia entre los mexicanos no debe ser sólo del terreno aspiracional.
Cualquier mexicano e incluso extranjero, puede expresar sus ideas, hacer hasta análisis de nuestra realidad nacional o de cualquier actor político u organismo en especial; pero nadie puede decirnos expresamente qué pensar, qué hacer.
En tiempos electorales, la descalificación a priori y futurista, desde ningún ángulo debe ser ya el camino.
Si usted amable lector quiere votar por Meade, vote, si lo quiere hacer por Zavala, también: sufrague pues, por quien usted crea merecedor de su voto. Lo insto también, a que si existe la oportunidad y usted desea hacerlo, discuta sus puntos de vista, sus inquietudes, sus razonamientos y todo lo que crea necesario para defender sus intereses propios y los de su comunidad, pero no nos descalifiquemos más sin pruebas, incluso sin argumentos.
Que quien aspire a ganar en la contienda electoral en cualquier nivel y espacio, lo haga con ideas, propuestas y promesas que sepa podrá cumplir. No denostemos ya a quien piensa distinto a nosotros porque estamos cayendo ya en el terreno peligroso de la discriminación, de la intolerancia que pueden constituirse en determinadas circunstancias como delito.
La concordia pues, no es más que dirimir en el terreno lo más armonioso posible. Sí podemos.
Acta Divina… La empresa Televisa informó sobre la cancelación del programa La Mudanza, que conducía el periodista Ricardo Alemán en Foro TV, por un mensaje en twitter que la televisora consideró inducía a la violencia.
Para advertir… Alemán podrá ahora advertir que después de todo, su estrategia de denostación y provocación, le ha sumado intención del voto a Andrés Manuel, al grado que la vocería de Los Pinos señaló un no a la violencia en la contienda electoral.