La candidata de la coalición “Por la Ciudad de México al Frente”,
Alejandra Barrales Magdaleno, presentó a Laura Ballesteros como la encargada del proyecto de movilidad en su equipo de campaña.
En conferencia de prensa, la aspirante a la Jefatura de Gobierno aseguró que se trata de una mujer con amplia experiencia en el tema, toda vez que fue subsecretaria de planeación de la Secretaría de Movilidad en la administración de Miguel Ángel Mancera.
En el Asta Bandera de la Plaza de los Hombres y las Mujeres Ilustres de la Constitución de 1917, en la delegación Iztapalapa, la abanderada de los partidos de la Revolución Democrática (PRD), Acción Nacional (PAN) y Movimiento Ciudadano (MC) destacó la importancia de incrementar el transporte público en la capital del país para reducir el tránsito.
Dijo que su propuesta en la materia contempla crear 410 kilómetros nuevos en el sistema de transporte, hasta ahora la capital cuenta con 580 kilómetros, así como una tarjeta universal que considere el acceso a todas las modalidades de la ciudad que pueda ofrecer crédito a los ciudadanos en caso de no contar con dinero.
Asimismo, apuntó que ofrecerá subsidio a los adultos mayores y a los niños y que se creará un centro de monitoreo de transporte que permita tener un control con los tiempos de traslado y que pueda ofrecer a los ciudadanos la posibilidad de conocer, por ejemplo, el tiempo que tardará en llegar el convoy del Metro.
Lo mismo que crear 24 kilómetros más del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro con la ampliación de las líneas 12, 7, 9, 8 y B; en cuanto al Metrobús, considera alargar la Línea 7 hasta Santa Fe e implementar una línea en el Circuito Interior, expuso al referir que también propone instalar teleféricos en zonas altas de la ciudad, como la Sierra de Santa Catarina y Santa Fe.
Por su parte, Laura Ballesteros resaltó que el Metro será nuevamente «el jefe» de los transportes públicos en la ciudad, e indicó que todas las modalidades que se plantean serían eléctricas, en un plan a 30 años, además de que se buscará que el gobierno federal participe con un peso por cada tanto que invierta el de la Ciudad de México, toda vez que serán necesarios 79 mil millones de pesos.