Ante cientos de espectadores que aba rrotaron la plancha de Fundadores desde temprana hora, por 25 año consecutivo se realizó este evento, con la cual de forma simbólica se recuerda la traición de Judas a Cristo, como una alusión de las quejas y descontento del pueblo, lo cual refleja en las figuras que se queman, terminando con ello la cuaresma y garantizando la resurrección el siguiente año.
En este 2018, se contó con 35 judas alineados de forma estratégica para lograr que el público asistente pudiera contemplarlos.Entre los muñecos de carton se encuentran las siguientes obras: “Al diablo con la lujuria”, “Ciugía plática”, “No todos los diablos tienen cuernos”, “Tuno”, Diablo comediante”, “Corrupción”, en las esquinas de las estructuras fueron colocadas figuras alusivas a plazas significativos de la capital potosina:
“El señor de las palomitas”, “Juan del Jarro”, “El aguador” y “La penitente.”La premiación de los ganadores de este año estuvo a cargo de Marieta Bracho, directora del Museo de la Máscara, es así que la premiación quedó del siguiente modo: 3er lugar, Ramón Pescina; 2do lugar, Víctor Anaya; 1er lugar, Manuel Monreal. En las menciones honiríficas, los reconocidos fueron: Thelma de la Cruz, Alejandro Morales y José Manuel Uresti.