La protesta la realizaron personas de zonas aledañas y se hicieron pasar como vecino de Las Palmas
Marcela Loyola
Habitantes del ejido La Palma se deslindaron de la manifestación realizada por un grupo de alrededor de 20 personas, quienes marcharon y amenazaron con realizar un plantón e invadir las instalaciones de la planta de CEMEX, ubicada en Tamuín, en San Luis Potosí.
Los habitantes del ejido, manifestaron que dicha manifestación se realizó el pasado lunes 19 de marzo, y estaban encabezados por Jorge Márquez Torres y Miguel Guzmán Michel, quienes trajeron a personas de zonas aledañas, quienes arribaron en vehículos particulares.
Cabe destacar, que los participantes en la protesta rechazaban hablar sobre el pliego petitorio, argumentando que únicamente Márquez Torres, podía dar información y también indicaron que eran oriundos de Ciudad Valles, y que por su asistencia les fue prometido un predio en el ejido Las Palmas. Cabe Señalar, que dicho predio, pertenece a la cementera, CEMEX, y son estas personas quienes han invadido la propiedad.
Mientras que algunos manifestantes reconocían que eran de Ciudad Valles, Márquez Torres, declaró que se trataba de ejidatarios legítimos, aunque sólo se encontraban ahí por la promesa de tierras.
De acuerdo con declaraciones de vecinos del ejido La Palma, que prefieren mantenerse en anonimato, el autor intelectual de las acciones es Juan Carlos González Romero, quien mantiene un conflicto con los directivos de las termoeléctricas y CEMEX, además que tiene antecedentes de haber creado conflictos y movimientos con el fin de obtener un beneficio económico propio, por lo que en esta ocasión, Márquez Torres y Guzmán Michel, bajo la tutela de González Romero, movilizaron y manipularon a personas de escasos recursos con promesas de tierra y dinero.
Denunciaron que hay personas queriendo invadir la propiedad, instruidas por Márquez Torres, esto con el fin de mantener el conflicto, quienes fueron convencidas de que el predio que invadan les será otorgado a la resolución del conflicto, sin embargo, según personas cercanas a los líderes, son ellos los que pretenden adquirir la posesión del predio.
Cabe señalar que SEDATU, en el año 1964, expropió por causas de utilidad pública al Ejido Las Palmas, Tamuín, una superficie de 1266 hectáreas.