Un policía disfrazado de remisero la salvó de que publicaran sus fotos prohibidas

A fines de 2016 una joven inició una demanda civil luego de ser extorsionada por Santiago Rodríguez de 24 años, quien le reclamó 10 mil pesos a la damnificada a cambio de no publicar en internet unas fotos prohibidas.

Según testificó la víctima ante la Justicia, ambos habrían mantenido una relación íntima de la que se registraron imágenes fotográficas donde se la veía sin ropa, pero que luego pidió que sean borradas. Sin embargo, tiempo después a través de una cuenta en la red social de Facebook, esas fotos fueron enviadas a personas de su entorno lo que desencadenó la inminente denuncia.

El 28 de diciembre de 2016, un usuario –identificado como mujer- de Facebook se puso en contacto con la demandante para advertirle que, si no pagaba la suma de 10 mil pesos, las imágenes iban a ser difundidas en sitios web pornográficos, además de enviárselas a sus familiares. Asimismo, le detalló las indicaciones para la entrega del dinero.

En ese contexto, la mujer extorsionada cumplió al pie de la letra y el 4 de enero de 2017, cerca de la medianoche, la joven fue hasta la entrada del Parque Indoamericano en un remis que en realidad era manejado por un policía vestido de civil. Dejó la cartera con el dinero en el punto que habían acordado y se alejó con el auto. Sin embargo, nunca quitó su vista del botín, hasta que en un momento observó cómo un hombre en moto se detuvo en el lugar, se agachó y tomó la plata.

En ese momento, el policía corrió hacia allí y le gritó la voz de alto, pero el joven se metió el botín en una mochila y se subió a la moto, pese al esfuerzo por huir del lugar quedó atrapado. Finalmente, el juez Fernando Ramírez condenó a Rodríguez a dos años y seis meses de prisión por extorsión en grado de tentativa. Y como si fuera poco, deberá someterse al cuidado de un Patronato de Liberado por todo el tiempo de la condena y, además, deberá realizar dos horas semanales de tareas comunitarias.