El convoy humanitario que pudo entrar el lunes en Guta Oriental, el principal bastión opositor sirio, tenía capacidad para evacuar hasta un millar de personas, pero solo pudo sacar a 13 debido a los ataques de los rebeldes, informó un portavoz militar ruso.
Ayer, el Centro Ruso de Reconciliación pudo organizar la entrada a Guta Oriental de un convoy humanitario de la ONU con 247 toneladas de alimentos y productos de primera necesidad para la población civil. El convoy estaba preparado para evacuar de las zonas peligrosas hasta mil personas, pero a última hora de la noche solo pudo sacar a 13″, dijo el portavoz, general Igor Konashenkov.
De esas personas, cinco eran niños», agregó el representante militar en un comunicado.
El responsable ruso dijo que los combatientes opositores «impiden la salida de la población civil de las zonas de actividad militar y bombardean el corredor humanitario» a pesar de las treguas que se desarrollan cada día en virtud de la resolución 1401 del Consejo de Seguridad de la ONU.
Según denunció anoche la ONU, el convoy de ayuda humanitaria que entró ayer en Guta Oriental, tuvo que retirarse antes de tiempo por los bombardeos.
Según Konashenkov, en otra de las llamadas «zonas de desescalada» de Siria, la de Idlib, «en la última semana, con la ayuda del Centro Ruso de Reconciliación, se pudo lograr el acceso seguro a Alepo y el regreso a sus casas de más de mil familias sirias».
Con ellos, son ya más de 200 mil los refugiados sirios que han regresado a esa región, de acuerdo al militar ruso.
La única región de Siria donde las disposiciones de la resolución de la ONU son completamente ignoradas y no se está dando ninguna ayuda a los civiles es la ciudad de Raqa y el campamento de refugiados de Rubkan, bajo control de Estados Unidos”, notificó.