Los empresarios de la Ciudad de México de mandan seguridad y certeza en los trámites para abrir negocios en la capital del país, dijo Mikel Arriola, precandidato del PRI para contender por la Jefatura de Gobierno de la CDMX. Lo que nos dice el sector productivo de la ciudad es que, lo que se requiere, es primero, lo hemos repetido, una profunda política de desregulación.
Vivimos en una ciudad donde quieres abrir un negocio, y poner un restaurante o un hotel; se puede tardar entre uno y dos años, y además que tiene que repetir el mismo trámite en las 16 delegaciones, vemos una profunda economía informal que atenta y genera una competencia desleal, a las empresas formales, vemos una complicidad con el comercio informal con muchos de los gobiernos, al pedirles cuotas, al no reubicarlos, los comerciantes informales no son los malos de la película”, indicó el precandidato.
Al reunirse esta mañana en privado, con dirigentes del G9, que integra a las diferentes cámaras y cúpulas empresariales como Canacintra Canaco, Conca-naco y Coparmex entre otras, Arriola Peñalosa destacó que a través de una ventanilla única se buscaría reducir los tiempos actuales de los trámites, de un año a un mes.Arriola agregó que los empresarios denunciaron el riesgo y pérdidas que les genera la inseguridad en las diferentes zonas de la capital, así como la baja calificación en competitividad que se le atribuye a nivel nacional.Antes la Ciudad de México generaba el 26 o 27 por ciento del PIB Nacional, hoy apenas genera el 21 por ciento y se ha rezagado en la calificación de hacer negocios del Banco Mundial al lugar número 31, convirtiéndose en la ciudad menos competitiva después de Oaxaca”, agregó.
Además, compartió que los empresarios señalaron que les preocupa el porcentaje de delitos resueltos, que es muy bajo, por ello esperan una pronta reforma a la policía y avances en la detección de reincidencia delictiva, porque no hay sistemas o bases de datos que permitan a las autoridades verificar los antecedentes de los delincuentes.Finalmente, destacó que temas como el asalto al transporte les pega mucho en la productividad de sus trabajadores y han advertido un incremento en las cifras de inseguridad.