Durante un estira y afloja que se pro longó por varias horas y culminó apenas unos cuantos minutos antes del plazo para presentar ante el Consejo Estatal Electoral de Participación Ciudadana (CEEPAC), para registrar las alianzas, finalmente se llegó a los acuerdos donde el Partido Revolucionario institucional cederá el 50% de la votación que obtenga en la elección para Diputados Locales, al Partido Verde (PV), Partido Nueva Alianza (PANAL) y Conciencia Popular (CP). Los priistas, ajenos a los acuerdos vaticinaron una “catástrofe electoral y el desquebrajamiento aún más del Tricolor”.
Unos cuántos minutos antes de vencer el plazo para registrar las alianzas partidarias en las candidaturas a la diputación local, presentaron ante el CEEPAC, fueron presentados los acuerdos para competir juntos en los 15 distritos electorales.
Los últimos reportes que se tienen, indican que el PRI y CP, van juntos en siete distritos, mientras que el mismo PRI va en seis con el PV y en dos con el PANAL, pero lo interesante de todo esto es que el PRI sale con la peor parte, porque los fortalecidos con los acuerdos es la llamada “chiquillada”.
Por ejemplo, CP tiene asegurado el 25% de los votos y los dos restantes, PV y PANAL se llevarán el 25% cada uno, lo cual le dejará al PRI con el restante 50%, lo cual quiere decir los partidos llamados pequeños serán los verdaderos ganadores, pues aún, en caso de salir derrotados en las elecciones, obtendrán prerrogativas económicas y la ganancia político electoral.
En la mesa de negociaciones estuvieron hasta el último momento los representantes de los institutos políticos involucrados; Martín Juárez Córdova, del PRI; Sergio Oviedo del PV, CP Gandhi, y el representante del PANAL.
Fue una negociación muy ríspida, todos defendían sus posiciones y exigían porcentajes a los que aseguraban tenía derecho, por tener “muchos militantes”, los más aferrados fueron los representantes del PV y CP, quienes defendieron sus posiciones y y finalmente se llevaron, principalmente CP, la mayor tajada.